Capítulo 22

5.4K 168 10
                                    

   ¿Cómo afrontar el dolor? Solo siendo honesta conmigo misma y comprendiendome.
Sabía que las cosas iban mal, pero tenía que hacer que esto, de alguna manera, funcionara. Mi relación fué arruinada por una persona, Carol, también Harry en gran parte, pero siempre tenía su nombre en mi cabeza los últimos días. ¿Podría hacerme sentir mejor deshacerme de ella? Lo haría, para mí.
Estaba decidida, tuve tiempo para pensar las palabras correctas que decirle, sin dar vueltas pero sin decirle algunas cosas. Sebastian estaba de mi lado, la buscó y la trajo a la oficina central, la de mi padre. El no estaba hoy, así que no tendría problema en usarla.
Cuando la ví entrar todo el odio y el rencor que llevaba dentro se desvaneció cuando la noté tan inocente y tímida, quizás hasta intimidada ante mi presencia, pero sabía que no era así, era la primera vez que la veía pero ya había escuchado de ella.

-Buenos días.-Dijo con su voz baja. Sebastian la invitó a sentarse enfrente mío, pero yo estaba de píe. Se veía más bonita de lo que esperaba, y su grandioso cuerpo no se podía ver en la foto de su expediente. Sentí mi autoestima por el piso cuando ví con quién había estado Harry, la preferia a ella antes que a mí.- Pensé que el dueño de la empresa quería hablar conmigo.

-¿Y que hay de la hija del dueño?.-Dije intentando sonar divertida, y que mi rostro no se viera triste como lo estaba por dentro, pero parecía que lo que dije sólo la perturbó más.- También puedo hablar con los empleados cuando veo algo que no me gusta.-Dije seria está vez, ella levantó la cabeza del suelo consternada.

-¿Hice algo malo?.-Preguntó mientras se mordía una de sus largas y rojas uñas de su mano.

-Claramente.-Dije obvia y pareciendo molesta, lo que realmente me molestaba es que aparentara ser tan frágil y tímida o conservadora.- ¿Carol, cierto?

-Así, es.-Suspiró.

-¿Te parece profesional tener una aventura con otro empleado de la empresa, mientras que a todo lo que le debes dar importancia es a tu trabajo?.-Pregunté sin rodeos. Sus mejillas se volvieron rosadas y sus ojos se abrieron luego de escuchar lo que le dije, sólo esperaba que no lo negara, no quería hacer esto más difícil para mí.

-No lo veo profesional, pero puedo explicarlo....-La interrumpí.

-Llegastes aquí gracias a que nosotros tuvimos el tiempo de poder ver tus estudios, sos una profesional, y es una lástima que algo como lo que hicistes pueda quedar marcado en tu currículum.- Me senté enfrente de ella mirándola directo a los ojos, sus ojos que parecían tan enojados y desconformes con lo que decía.

-No pueden ponerlo en mi currículum, no algo así.-Puso sus manos sobre el escritorio, golpeandolo y haciendo que el ruido suene en toda la oficina.

-Si podemos.-Dije sin importarme para nada que ella se comportará de esa manera.- ¿Sabías que era un hombre casado?.-Le pregunté lentamente, intentando que entienda que había arruinado a una pareja de la peor manera posible. Ella quedó en silencio, me miraba a los ojos pero corría su mirada con nerviosismo. No iba a hablar antes de que ella dijiera algo al respecto.

-No, no lo sabía.

-Y con un hijo.-Suspiré con tristeza, ella no sabía quién era yo, sólo me conocía por que era la hija del dueño, a Harry no le importó decirle. Me levanté de mi asiento indignada, miré a Sebastian que estaba detrás de ella, en una esquina del salón observando todo. El me asintió para que siguiera con lo que tenía que hacer.

-Siento mucho que esto esté ocurriendo, yo puedo arreglarlo, no tendré más relaciones aquí dentro, ningún tipo de distracción. Lo nuestro acabó hace meses, el terminó conmigo, no me dirije la palabra desde ese día.- Dijo con desesperación también levantándose de su asiento. Siempre supuse que ellos dos seguían juntos, estaba sorprendida por sus palabras. Pero nada de eso justificaba lo que me hizo.

Everything You Are || H.S EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora