Vida Indecente -MJ Fanfic [#MoonwalKingAwards2017][#SmileAwards]

"Impotencia"

Michael: -Se acerca un poco más- Discúlpeme pero no puedo dejar de admirar lo bella que se encuentra hoy -Me mira fijamente a los ojos y acaricia mi mejilla.

Juro que no puedo estar más feliz, algo dentro de mi pecho salta sin parar, tengo miedo, nunca he sentido esto; es muy extraño.

Joan: Gracias, señor.

Michael: -Sonríe- Que lastima que no recuerde.

Dice y se aleja de mí.

Joan: ¿Lastima? ¿Por qué?

Me mira y sonríe con algo de... ¡Ahhh! No lo sé, no sé cómo describir su mirada, su nueva actitud, el sentido con que dice cada palabra. Estoy muy confundida.

Michael: Lastima que Jennifer se haya ido ¿No? -Toma un adorno de mi ahora escritorio, y juega con él.

Los nervios han bajado, cuando se alejó sentí un gran alivio, mis pulmones ya podían funcionar sin ningún problema. Ahora quiero hacerle lo que él pensaba hacerme hace unos segundos atrás ¡Joder! Necesito controlarme, averiguar lo me pasa, no puedo seguir así; me volveré loca.

Joan: Sí... Es una lástima. Pero no lo diga como si usted no hubiese tenido que ver con el despido. De hecho usted tiene toda la culpa.

Michael: No soporto a una chica acosándome.

Joan: -Suelto una carcajada- No puedo creerlo.

Michael: -Sonríe- ¿Qué? -Arquea una ceja.

Joan: Nada, sólo que es algo curioso escuchar eso de sus labios cuando yo...

Michael: Has intentado lo mismo que Jennifer ¿No? -Se acerca a mí.

Joan: -Lo miro con desdén- ¿Por qué no me has despedido?

Michael: Porque...

Joan: Mejor dímelo luego. -Le corto- Tengo hambre, invítame a almorzar -Le guiño un ojo.

Michael: -Sonríe con algo de picardía, simplemente me mata- De acuerdo.

Joan: -Tomo mi cartera y teléfono- ¿Nos vamos?

Michael: Iré por mi móvil, vuelvo en un minuto.

Joan: Bien.

Entra a su oficina y sale enseguida, no sé cómo me siento. De pronto me atacan los nervios y luego la lujuria, quiero saber qué es lo que tiene este hombre o si acaso me ha hechizado. Bajamos a la última planta, doy gracias a Dios que la cabina del ascensor no estaba vacía cuando llegó al último piso, se hubiese tornado un ambiente muy incómodo. Con las típicas y molestas miradas de las recepcionistas, cruzamos la puerta de salida.

Michael: ¿Irás en tu auto o quieres ir en el mío?

Me gusta el peligro y de sólo pensar que estaré a solas con él en su auto, me eriza la piel.

Joan: En el tuyo estaría bien.

Michael: Disculpa la pregunta, pero ¿De verdad tienes auto?

Joan: Sí, es el auto rojo que está por allá -Señalo el auto frente al suyo.

Abre sus ojos como platos, sabe que es el mismo modelo que el suyo y que cuesta un ojo de la cara.

Michael: ¿Es tuyo?

Joan: No, de mis padres -Contesto sarcástica.

Michael: Ahh. Me lo imaginé.

Joan: No seas tonto. Claro que es mío, no tengo padres.

Michael: Ohh... Disculpa...

Joan: No, discúlpame tú a mí por lo que pueda hacerte dentro del auto -Camino y me coloco en la puerta del copiloto de su auto.