Sin Miedo A Nada

Capítulo 91

CAPÍTULO 91:

Peter: si sabes que no me importa nadie mas que vos, yo te amo a vos, te quiero a vos, y te necesito solo a vos.

Lali: pero yo necesito estar segura de eso me entendes? Y si estoy en tu casa durmiendo y me despierto con ganas de estar con vos y de verte y resulta que te encuentro con una mina que no hace otra cosa que tirarte onda, sentado en el living y ella prácticamente encima de ti, eso no me da nada de seguridad

Peter: te entiendo, te juro que te entiendo. No pensé que esto te fuera a poner asi, nunca lo imagine. No le di importancia porque La es una nena ella, además ni arranca al lado tuyo –sonriéndole-

Lali: no va por eso Peter. No me gusta esta piba, y ya te lo hizo saber hasta Euge!

Peter: esta bien, tenes razón. Perdon, perdóname. –acercandose- no peliemos, estamos a dos días de tu cumpleaños, no da que pasemos enojados

Lali: bueno pero no le des mas bola a la pendeja, porque te juro que te mato

Peter: te prometo que no –abrazandola muy fuerte- te lo prometo

Lali: no te quiero perder –aferrandose a el-

Peter: no me vas a perder chiquita –dandole un beso en la frente- como te sentís?

Lali: creo que mejor, ya no estoy mareada por lo menos

Peter: a ver veni –enfrentandola a el y posando sus labios en la frente de ella- fiebre ya no tenes por lo menos

Lali: tuve fiebre?

Peter: si un poco, pero tenes al mejor enfermero que se encargo de bajarte la temperatura

Lali: gracias –dandole un corto beso-

Peter: queres que te prepare algo de comer?

Lali: quiero unos mimos tuyos, a ver si me termino de sentir mal. Puede ser?

Peter: claro que si –sonriendo y abrazandola-

Cuenta Peter

Domingo de noche, cumpleaños de mi novia en su casa con algunos familiares. Claramente la había llamado a las 12, quería ser el primero en saludarla. A la mañana le mande a la casa una bandeja con tremendo desayuno y un oso de peluche con una carta que decía que a las 12 la pasaba a buscar, porque asi fue, la pase a buscar y la lleve a almorzar a uno de nuestros lugares favoritos. La pasamos increíble! Alli le di mi regalo, que era una cámara de fotos profesional, de esas que están equipadas con todo y literalmente todo, y aparte de eso le regale un curso de fotografía en una academia que ella me había comentado. Le encanto obviamente, era algo que ella de verdad quería, y estaba feliz, nada mejor que verla feliz.

A la tarde cuando llegamos a su casa los padres de ella la estaban esperando con su regalito, un auto nuevo. Si, si, mi novia con auto! Los padres querían que ella fuera mas independiente y no tenga que andar pidiéndoles a ellos o a mi que la fueramos a buscar o llevemos a ciertos lugares. Ella copadísima con su nuevo auto, chiquito y económico. Algo bien para Lali.

Ahora nos encontrábamos en el momento de la torta, la familia de ella era toda muy copada por ende ese momento dejaba de ser uno incomodo en el cual uno se siente un boludo mientras todos le cantan, ellos lo hacían a su manera, lo hacían mas divertido. En el momento en que ella tuvo que pedir los tres deseos cerro sus ojos y todos seguían en la suya cantándole o en lo que estuvieran, cuando ella los abrió me miro y me guiño un ojo.  COMO LA AMABA POR DIOS!!! Me podía tanto esta petiza! Nos sacaron un par de fotos juntos a nosotros mientras que ella sentada en mis piernas, compartíamos un pedacito de torta.