Junto A Ti. (Iván Zavala)

12 | Todo Lo Quiero A Tu Lado.

Junto A Ti.

Capítulo doce: Todo Lo Quiero A Tu Lado.

Iván estaba parado junto a la puerta de mi casa, había hablado ya con mis padres sobre él y la manera tan jodida en que entró en mi sistema, ellos estaban de acuerdo pero Armando se interponia.

-Te vez muy guapo Iván-.Sonreí ante ese comentario que había salido de mi sin poder controlarlo.

-Y tu cada día más delgada.

Sentí como mi estómago dr removió, podía sentirlo, tenía razón, había perdido peso con mayor velocidad.

-Te are que comas algo ahora mismo-.Me miraba con algo de furia en su rostro por la contextura de mi cuerpo-.Y está vez no saltarán directo al postre.

-Vamos entonces.

Llegamos al lugar, elegancia era lo que sobraba, Iván sólo sostenía mi delgada mano con fuerza mientras nos dirigimos en silencio a una mesa.

-¿Que desean ordenar?-.El guapo mesero interrumpió el arrollador y placentero silencio, y era guapo pero el chico frente a mi a caparaba mi atención por completo.

-Un filete por favor y para la señorita ¿?

-Lo mismo que él gracias.

Con Iván había sido más fácil pasar bocado, no paraba de decirme cuán hermosa me vería si subía un par de quilos más.

-¿Deseas postre Isa?

-Si. ¿Pastel de fresas y mango?

La sonrisa de Iván se hizo más grande al salir esas palabras de mi boca, podía ser difícil engullir un platillo de comida pero no era nada complicado comer hasta la más mínima migaja de un pastel.

-Esta bien, para ti lo que sea preciosa.

Sentí que mis mejillas comenzaron a arder por sus palabras, la sangre subió por completo a mi rostro y estaba a punto de vomitar un poco de mariposas que había de más en mi estómago.

-Aquí tiene su pastel srta.

-Gracias-.El mesero me miraba de una manera muy rara que sabía a Iván no le gustaba en lo más mínimo.

-¿Desea Algo más?

-No gracias, MI NOVIA y yo estamos bien-.Iván soltó aquello como si de un golpe justo en su ojo se tratará, estaba molesto y agradecía que no fuera conmigo-.Le gustas a todo mundo.

-¿A que te refieres?

-Ese mesero no te a quitado la vista de encima desde que llegamos.

-No lo eh notado-.Reí por la cara que Iván puso, era una mezcla de celos y enojó, esa mezcla que me provocaba ganas de besar durante un par de horas sin parar-.No puedo ver a nadie más si te tengo a ti aquí conmigo.

La cara de Iván se volvió en un rojo carmesí haciéndome sentir grande, era mío, lo sentía así, tan mío que ¡joder! Dolía. Sus ojos tomaron un brillo peculiar tan hermoso que me hizo suspirar, quería dejar el pastel y besar sus labios hasta que el sol saliera, él sólo estaba hay sentado con el color subiendo cada vez con más intensidad a su rostro.

-¿Es en serio?

Me limite a asentir mientras él tomaba mis manos entre las de él, ¡Dios soy la mujer más afortunada al tenerlo a él para mi!