19. Descubriendo la verdad

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-Mi padre preguntó dónde estabas, pero le dije que me dejaste en un lugar seguro –dijo Mark y se sentó en la cama cerca del otro.

Se hizo un silencio en el que los dos se miraban. Jackson acercó la mano a acariciarle un poco el pelo al contrario y aquello le creaba más dudas al americano sobre los sentimientos del menor por él. Finalmente rompió el silencio el chino.

-¿Por qué dijiste que Yugyeom te odia porque tiene celos de JB? ¿Y por qué les dijiste que era su nuevo novio?

-Jackson...

-Me dijiste que la rivalidad de JB y tú era por las anteriores olimpiadas, no por algo personal.

-Si hay cosas personales detrás pero no quiero hablarte de eso. Quedan tres días para irnos y me gusta cómo eres ahora –dijo Mark desviando la mirada.

-Está bien, no hables si no quieres, pero no va a cambiar nada en mí.

-Igual que no quieres responderme sobre lo cariñoso que eres conmigo, no quiero hablarte de eso.

Jackson cayó en la cuenta de que Mark tal vez pensaba que él era gay y la idea lo tenía sorprendido así que era mejor dejar el tema. El americano suspiró al no obtener respuesta y se levantó de la cama. Se quitó la camiseta dejándola en la cama y luego se giró de cara a Jackson, quitándose los pantalones. Quería saber cómo reaccionaba.

El chino miró la camiseta en la cama y luego lo miró a él. Inevitablemente le miró el cuerpo pero luego lo miró a la cara. Sentía que Mark estaba insinuándose y aquello le puso bastante nervioso. Se levantó de la cama sin saber por qué ni a dónde ir, pero para cuando se dio cuenta estaba cara a cara con el mayor.

-¿No te vistes...? –preguntó Jackson y le sonrió un poco, disimulando el nerviosismo, aunque no lo logró.

-¿Te encuentras bien? –preguntó Mark y colocó la mano en su mejilla.

Jackson sintió un escalofrío y le miró los labios, luego a los ojos y se relamió. Todas aquellas acciones las hacía sin darse cuenta. Solo pensaba que debía escapar pero no podía, o tal vez no quería. Sabía que el terreno aquel era peligroso y desconocido pero Mark se veía tan sensual como nunca antes, la forma en que lo miraba lo hipnotizaba.

-Jackson...

-Estoy bien, sí. Bien. Muy bien. De maravilla –dijo el chino y asintió varias veces muy rápidamente.

-¿Seguro? –preguntó de nuevo Mark sonriéndole bastante tierno.

-Por favor Mark...

Jackson susurró de forma suplicante, tanto que el americano decidió apartarse de él y darle la espalda para coger la ropa que había decidido. El chino suspiró aliviado pero no supo por qué quería estar en contacto con el mayor. Se acercó a Mark y lo abrazó por detrás pegando los cuerpos de ambos.

-¿No querías que me alejara...? –preguntó sonriendo el mayor.

-No voy a cambiar contigo, me gusta cómo eres sin importar qué.

-¿Te gusto? –preguntó Mark.

-¿Eh? No, no es eso. Digo que... Mark eres... ¿Es que yo te gusto?

-¿Mm? No, no es eso –repitió el americano de la misma forma que le había dicho el otro.

-Dejemos esto así, así está todo bien –dijo Jackson suspirando y se acercó a dejar un beso en el hombro del mayor.

Se separaron y el americano terminó de vestirse mientras el otro trataba de calmar su mente y su corazón, también su nerviosismo. Mark se echó colonia y cuando terminó se acercó al menor y le acarició con cariño la mejilla mientras se miraban.

-¿Sólo es conmigo? –preguntó el mayor, suponía que el chico nunca se había sentido así con un hombre y debía estar confundido.

-Sí.

-Eso está bien, no te sientas mal. Las cosas están bien así –dijo Mark haciéndole ver que no le iba a meter ninguna clase de presión y le dio un beso en la mejilla.

-¿Entonces tú?

-Ya sabes por qué Yugyeom está celoso de mí.

-JB hace cuatro años...

-Espero que de verdad no cambies conmigo –dijo Mark, ahora sabía lo que le había estado ocultando.

-No lo haré –dijo Jackson y llevó una mano a la mejilla del más alto.

Se miraron un momento, con leves sonrisas. Indudablemente a los dos le dieron ganas de besarse pero uno no quería apresurarse y el otro no se sentía preparado así que lo reprimieron.

-Ve con tus padres a cenar, vas a llegar tarde.

-¿No vas a venir en serio?

-Ven a mi cuarto cuando vuelvas, pásalo bien y ya podremos celebrarlo otro día... ¿Mm?

-Malvado, yo iba contigo –se quejó Mark y se acercó a darle un mordisco en el hombro.

Se despidieron en la entrada de las instalaciones algo más distantes para no seguir avivando los rumores que ya había de ellos y el mayor se fue con su familia.


See the light (MARKSON)حيث تعيش القصص. اكتشف الآن