Hey Luke, I love you!» muke

«u»

Al día siguiente, Michael mantenía la sonrisa en su cara a pesar de que probablemente anoche hubiera estado llorando.

Amaba al chico rubio más de lo que se amaba a sí mismo, y si él era feliz con esa chica no se interpondría en su felicidad.

Claro que Ashton no pensaba lo mismo. No aceptaría que su mejor amigo sufriera por un malentendido.

Luke le había dicho que aquella chica -de la cual ni siquiera sabía su nombre- lo había besado.

“— Ni siquiera la conozco Ash, joder. Y-yo quiero a Michael, amigo. No me veo con otra persona que no sea él.”

Había confesado el rubio. Y Ashton iba a hacer que Michael entrara en razón.

Oh, claro que lo haría. Y si no quería escucharlo, lo obligaría.

Así que ahora, Ashton iba a su encuentro con Michael. Todos los días desde que entraron a secundaria, sin falta, Ashton iba al casillero de Michael, para acompañarse lo más lejos que pudieran a pesar de sus horarios y clases diferentes.

Lo encontró sonriendo tristemente y guardando sus libros.

Un nudo se instaló en su garganta al verlo intentando ser fuerte. Intentando ser feliz si Luke lo era, aunque no fuera a su lado. Y lo admiraba, porque si él estuviera en su lugar, ni siquiera podría hablarle a la persona que lo traía loco.

— Hey amigo.— saludó cuando llegó a su lado.

Michael sacó torpemente las pequeñas lágrimas que salían de sus ojos.

— Hey Ash.— saludó de vuelta, sonriendo de nuevo.

Ashton ya no aguantaba. Haría que siguiera con sus estúpidos -y tiernos- intentos de conquistar a Luke (aunque ya lo tenía más que conquistado).

— ¿En serio vas a rendirte?— tal vez había sido muy directo, y probablemente haría llorar a Michael, pero le importaba muy poco, porque vamos, es Ashton de quien hablamos, el chico que le recordó todos sus "fracasos" en aquel viaje escolar hace dos semanas.

— No me estoy rindiendo, Ashton. Lo estoy dejando ser feliz.— aclaró Michael, respirando profundamente porque sabía que Ashton lo haría perder la paciencia.

— No vayas a salir con la mierda de que "si él es feliz, yo también", porque es obvio que no va a ser así.— sí, Ashton estaba molesto.— Yo sé que lo amas Michael, y por eso mismo en vez de llorar, deberías ir con él, gritarle a la cara que te vuelve loco y luego plantarle un beso en la boca. Ya después me darás las gracias.— habló Ash.

— No digas estupideces Fletcher. No voy a hacer eso.

— ¿Por qué? Siempre haces lo que te aconsejo por más estúpido que sea.— frunció el ceño.

— ¿Y eso qué tiene que ver?— fue el turno de Michael de fruncir el ceño.— No voy a interponerme entre Luke y esa chica.

— ¡Pero si serás idiota!— exclamó — Fue un puto malentendido, Gordon. Así que ahora haz lo que te dije.

— Deja de ser tan terco, joder ¡He dicho que no haré eso!— gritó.

— No me hagas golpearte Michael. A menos que no me des una buena razón no dejaré de decirte que estás cometiendo una pendejada.— observó que Luke se acercaba a ellos por el pasillo y supo que debía de hacer.— Ahora dime, ¿por qué no?