No lo digas.....

LOS IMPOSTORES 2

Estoy desconcertada, si pienso bien en lo que acaba de pasar diría que estoy rodeada de personas maleducadas y odiosas, además de malintencionadas, aunque soy consciente de que no puedo juzgar a todos los de éste salón solo por el hecho de que dos de sus estudiantes me tratarón mal.
Y aquí estoy yo, muy nerviosa y con miedo,esperando a ese director, desearía estar con mis verdaderos compañeros, profesores, y la directora
Sabía que los extrañaria más en este tipo de circunstancias.
Aunque estoy casi segura que cuando le explíque al director lo ocurrido, entenderá la situación .
-¿Es usted Nataly Geraldine Carvajal?
-Si soy yo-El hombre delante mío tenía una apariencia canosa, una mirada intimidante y era de baja estatura.
-Soy el Director. Licenciado Enrique Aquino. Me comentó la señorita Luciana que, siendo su primer día en este colegio sólo ha demostrado una actitud desafiante hacia nosotros, la autoridad del colegio-Me miraba como si dentro de él tendría un odio y resentimiento hacía mi, aunque eso a mi no me intimidaba y mucho menos me callaría.
-Se equivoca-Trate de sonar natural-No mostre una actitud desafiante, le enseñaba modales, a un par de maleducadas, y con todo respeto Director, el ser nueva, no justifica, el hecho de que traten de intimidarme de esta manera y si me dejara expilcarle lo que sucedió.....
-Vaya, señorita Luciana, al parecer no se equivoco, tenemos a una busca problemas.
-Se lo dije-Siseo Luciana.
-Con todo respeto,  usted es un director, por lo tanto, no debería hablar de esa forma, sino, que ejemplo le esta dando a los estudiantes. -Yo siempre he sido alguien tranquila, y amigable, por eso, me llevaba bien con mis compañeros, los profesores y la directora, pero, eso no significa que no sepa defender mi opinión, por algo era presidenta de clases
PRESIDENTA DE CLASES
PRESIDENTA DE CLASES....
-Mire señorita, usted no me enseñará a mi como hacer mi trabajo.
Las personas como usted no sirven para la sociedad. -No aguantaba las lágrimas, pero no lloraría delante de éstas personas.
-No, por personas como usted, es que el país no progresa.
-Él, hiba a responderme pero en ese instante sonó la campana
-Esto no ha terminado. Buen trabajo Luciana, sigue al pendiente de tu salon. -Y con esas últimas palabras se fué
-Vaya, pero si te salvo la campana -me dijo Gálata, la pelirroja
-Aunque no la salvará siempre -Respondió Luciana, la pelinegra.

Muy bien Nataly, controlate, lo que acaba de pasar no puede dañarte. No llores Nataly.
Mientras trataba de controlarme, por la puerta del salón, empezaron a ingresar estudiantes. Me pregunto si ellos también tendran la misma actitud malintencionada que su presidenta de clases y su director.

Esto es extraño, el timbre sonó hace ya unos 10 minutos y siguen llegando estudiantes, es más nisiquiera ha llegado el profesor o la profesora.
Y algo más extraño todavía, es que ha medida que van llegando, no se saludan entre ellos.
Que extraño es todo esto y además...
-Este es mi asiento -Apareció un chico alto con ojos cafés y cabello castaño.
-¿Tu asiento?
-Si, no me has oído -mostró una cara de fastidio, Pero quien se cree que es, aquí la fastidiada debería ser yo, por aguantar a una bola de maleducados.
-No veo tu nombre en ningún lado.
-Mira aquí cada quien tiene su propio asiento por todo el año, así que debes esperar a la profesora para que ella te asigne un lugar. Ahora quítate
-Pudiste habermelo dicho desde un principio, además soy nueva y......
-Si, si,si, mira no te he preguntado. Ahora quítate
-Me levante y me dirigí a la parte de atrás del salón para quedarme ahí parada, sentí que desde que puse un pie dentro de este colegio, no han parado de tratar de humillarme. Aunque no les daré el gusto.
Vi como todos se acomodaban en sus lugares sin prestar atención a mi, y bueno yo tampoco preste atención a ninguno de ellos. Ya que ahora estaba segura que todos ellos serían igual de maleducados conmigo.
Si alguien me hubiera hecho esto, estando mis verdaderos compañeros presentes, estoy segura que me defenderían, Fernando era muy sobreprotector conmigo, pero ya no esta, debo cuidarme por mi misma.

-Buenos días estudiantes -apareció una mujer de unos 30 años, era un poco más alta que yo, traía puesto una  minifalda y una blusa demasiado escotada diría yo.
-Oh vaya, tú, la del fondo ¿eres la nueva verdad?
-Sí, lo soy.
-Ya he escuchado de ti, el director me dejo bien informada. ¿Cómo te llamas?
-Nataly Geraldine Carvajal
-Según tu historial, eres una estudiante modelo, aunque no cuadra con lo que me dijo el director sobre ti, debe ser porque en tu anterior colegio tenian unos estudiantes  problemáticos y no entendían las clases, y tú resultaste ser lo mejor que había y fuiste sobrevalorada.
Mmm, suele ocurrir. Ahora veamos donde te vas a sentar podria ser....
-Disculpe pero usted no me conoce y tampoco a mis antiguos compañeros así que no hable como si me conociera o los conociera a ellos.
Asi que le pidiría con mucho respeto que se guarde su opinión.
-Silencio -Me grito -No pienso aguantarle su irrespetuosidad.
-Usted me falto el respeto a mi -Le respondí.
-Suficiente, tome asiento en el fondo y
Haga lo menos posible para que no la note.
- Hice lo que me dijo y tome asiento en la última fila.

Toda la clase me la pase en silencio, sintiéndome cada vez más sola.
Hasta que sonó la campana de descanso y salí lo más rápido que pude del salón.
Quería un lugar solitario para llorar así que avance lo más rápido que pude.
Llegué a un lugar alejado. Y me senté debajo de un árbol.
-Por favor que alguien me ayude, me siento sola, más de lo nunca me sentí.
Por favor aparezca alguien y sálveme.
-Lo decía mientras lloraba

-Hola mamá
-Oh, hija, ya has llegado y bien, como te fué
-Pués normal.
-¿Cómo te trataron? Ya tienes amigos nuevos.
-Mamá, estoy cansada, ¿hablamos en la cena?
-De acuerdo hija.

Sin decir más subí a mi habitación y desee con todas mis fuerzas que esto sea una pesadilla, despertar mañana y
que todo sea igual que antes.