NARRA JUSTIN.

-¡Ya tengo el regalo perfecto!- entra Maejor a la habitación con una caja de pizza.
Regreso a mirarlo y deja la pizza sobre mis piernas.
-Ella ama la pizza- defiende su idea elevando los hombros.
-Listo, gracias- término la llamada mirando a Maejor con cara de "deberías utilizar tu cerebro".
-¿Quién era?- pregunta.
-El regalo perfecto- respondo y por fin puedo tener tranquilidad.
Ahora ya todo está solucionado.
-¿No me vas a decir que es?- pregunta molesto.
-Pronto lo sabras- digo y el sale de la habitación fingiendo resentimiento.
-A ver cuanto te dura- grito para que me escuche.
No escucho la puerta cerrarse y estoy a punto de levantarme cuando Jaxon llega junto a Penélope, su niñera.
-Jaxon vamos a bañarte- le dice ella cuando mi pequeño monstruo corre hacia mi.
-Yo lo haré en un rato- le digo con una bonita sonrisa a la que ninguna mujer puede resistirse- tomate la noche libre- agrego y ella se retira tras una sonrisa en respuesta.
-Espero que tu sexy niñera no se imaginé otras cosas- le digo a Jaxon aún que se que no entiende nada.
-¿Por qué no has ido a cenar conmigo?- pregunta molesto.
-Porque tu querías Mc'donald y eso está lleno de personas- le explico.
-Las personas van a verme a mi, no a ti- me informa y suelto una carcajada.
-Es verdad- le doy la razón y beso su cabeza.
Mi iPhone suena en algún lado y cuando doy con el es papá.
-Bieber- contesto.
-¿Cómo están mis pequeños?- pregunta y puedo escuchar que está conduciendo.
-Bien, todo tranquilo- le informo.
Aún que nunca me lo a dicho se que le asusta un poco cuando uno de mis hermanos vienen a verme sin él, piensa que no me tomaré el tiempo de cuidarlos o algo así, pero cuando sea padre quizás lo terminé de entender.
-¿Y Hailey?- pregunta Jaxon dejando su tablet a un lado- no a venido a verme.
-La veremos mañana, enano pero si quieres enciende la Mac y la llamaremos.
Sale corriendo a por la Mac que está en la cama y yo vigilo todos sus movimientos desde donde estoy.
-Pensé que estabas quedandote en casa de Hailey- dice mi padre buscando más información.
-Lo hago pero con Jaxon aquí pensé que sería abusar, estoy en el hotel con Maejor- respondo.
-¿Pasarás San Valentín con ella?
-Fue eso lo que le dije a Jaxon, ¿no?
-Te llamaré mañana, cuidate y cuida de nuestro pequeño.
A pillado la indirecta de que no voy a decir nada sobre mañana.
-Adiós, papá.
Ok, si, estoy molesto con él. Pensé que vendría con Jaxon para ir a los Grammys conmigo y a última hora me cancela, tendrá la ley del hielo hasta que haga algo para enmendar eso.

-Buenos días- saludo a Penélope que está desayunando en la mesa principal.
-¿Es Navidad está mañana?- pregunta al verme.
Sonrió, hoy estoy muy feliz y llevo algunos regalos en los brazos.
-Para algunos si- respondo y dejo todo sobre la mesa- debo salir pero te llamaré para que lleves a Jaxon más tarde.
Asiente y vuelve a poner toda su atención en el teléfono.
-Entregale esto cuando despierte- le digo dejando dos regalos sobre la mesa- el primero es tuyo, feliz San Valentín- no le doy oportunidad a que diga nada, salgo del lugar con prisa.
¿En que me has convertido, Baldwin?

NARRA HAILEY.

Estoy nerviosa, no dejó de dar vueltas por toda la habitación mirando la bolsa que reposa sobre la silla favorita de Justin.
Estoy segura de que en cualquier momento va a llegar y odio mi outfit, cualquiera que me vea vestida así el día de San Valentín van a pensar que estoy demente pero Justin y yo acordamos un desayuno casual, sin nada elegante.
Escucho un auto entrar y el corazón se me acelera, me asomo a la ventana y veo el furgón entrar, eso quiere decir que saldremos en mi auto, justo como lo tenía planeado.
Vamos bien, Baldwin.
-Hailey, el señor Bieber a llegado- me informa Gregorio entrando con delicadeza.
-Hazlo subir- le pido y corro a echarme un vistazo en el espejo.
A su lado soy tan común.
Mi teléfono vibra encima de la mesa, es un mensaje de Matthew.

© 《Acostúmbrate It ©Where stories live. Discover now