Cuando el azabache llevó sus ojos a una mandíbula afilada, su piel color caramelo y hacia una nariz perfecta, comenzó a sentirse cada vez menos temeroso. Tal vez era la indecisión de la criatura de hacer algo más que atraparlo de esta forma o tal vez era el hecho de que la forma humana tenía incluso el más pequeño de los detallesㅡcomo el pequeño lunar en la punta de su narizㅡque hacían que JungKook pensara que estaba tratando con algo que podía manejar.

ㅡHumano.

JungKook dijo algo, amortiguado por la palma del otro. Claramente confuso, el monstruo quitó la mano, sin dejar de mirarlo con cuidado.

ㅡYo dije, Jeon JungKook. Mi nombre es Jeon JungKook. ㅡEl monstruo abrió la boca, pero JungKook siguió hablandoㅡ. ¿Cómo te llamas?

Jimin llamó a la puerta del baño y en lo que pareció ser una nube de humo, la criatura desapareció.



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JungKook estuvo unos días sin ver al monstruo, pero sabía que no era el final.

Se las arregló para comprar una pequeña lámpara en forma de globo que no proporcionaba mucha luz, pero lo ayudaba a relajarse por la noche. Él siempre se quedaba dormido con ella encendida, y se despertaba con ella encendida también. Pero una noche, justo cuando estaba rindiéndose en las garras del Areneroㅡcomenzaba a preguntarse si eso era realㅡsu estado aturdido captó la repentina falta de luz y el sonido del interruptor lejano en sus oídos. Su cuerpo se aferró desesperadamente al sueño, pero sus ojos se abrieron de todos modos, terminando por mirar a través de la oscuridad mientras sus manos se extendían para alcanzar el cable del interruptor. La luz se volvió a encender y con la iluminación tenue, JungKook divisó la forma negra del monstruo encorvado sobre su cama. No era el monstruo lo que le daba miedo, sino la proximidad.

ㅡNo pensé que fueras a volver. ㅡJungKook sonrió, su reacción positiva causó que el monstruo inclinara su cabeza hacia un lado.

Este demonio era ¿se atrevía a decirlo? Lindo.

ㅡEsto sería un poco más fácil si estuvieras en tu forma humana.

El monstruo se movió hacía atrás sobre sus patas y gruñó peligrosamente (JungKook asumió que era un hombre por la forma que tomaba cuando era "humano") Pero JungKook tocó la cama y se movió hacia un lado.

ㅡPuedes venir a sentarte.

Gruñó de nuevo y se marchó.

El repentino silencio sonó fuerte en los oídos de JungKook, y buscó alrededor de la habitación por cualquier signo de movimiento. Sintió una corriente de aire a su lado y la cama se hundió, de pronto la forma humana del monstruo apareció allí sólo a unos pocos centímetros de él.

ㅡ¿No estás asustado de mí?

JungKook parpadeó, sin saber si debía reconocer la declaración o no. Se inclinó hacia atrás cuando el hombre se acercó, examinándolo.

ㅡ¿Por qué tu corazón es de la forma que es?

JungKook sólo parpadeó una vez más, la confusión era cada vez más evidente en su rostro. ㅡ¿Qué quieres decir?

ㅡ¿Cuántos años tienes?

ㅡVeinte.

ㅡ¿Nunca te han roto el corazón? ㅡSe inclinó aún más cerca, invadiendo el espacio personal de JungKook. ㅡ¿Por qué nunca has amado a alguien?

Las cejas de JungKook se juntaron en una frustración repentina. ㅡAmo a mi madre y mi padre...

ㅡMe refiero a amar a alguien con quien no compartas lazos sanguíneos. Siento curiosidad, debido a que tu corazón está tan protegido, pero nunca ha sido herido por un amor, tu felicidad es pura y genuina. Un corazón tan hermoso como el tuyo es difícil de encontrar, y lo quiero. Pero luego está tu alma... ㅡSu enorme mano se colocó sobre el pecho de JungKook, permaneciendo allí para sentir el suave golpeteo.

ㅡ¿Por qué no lo has tomado? ㅡLa voz de JungKook fue apenas un susurro.

Sus miradas se encontraron en la oscuridad, y un aura densa cubrió la quietud. El monstruo se acercó más, sus mechones rubios cayeron y cepillaron sus ojos, juntándose con sus pestañas. JungKook se preguntó si estaba trastornado por pensar que un demonio era atractivo.

ㅡPorque no es sólo tu corazón lo que es hermoso.

Las palabras despertaron una especie de nerviosismo totalmente diferente a través del sistema de JungKook. Él miró hacia arriba directo a la mirada implacable del otro, el doble significado de esas palabras cubrieron su piel y su corazón. Se preguntó que tanto sabía esta cosa sobre él. ¿Cuánto tiempo había estado siguiéndolo, pasando desapercibido hasta que decidió salir de su escondite? O lo más importante: ¿De dónde venía?

La piel de JungKook se estremeció con el ligero toque de los dedos del demonio en su chaqueta de pijama; estas que se fueron deslizando sobre sus clavículas expuestas, causando que aumente la sensación de piel de gallina en su cuerpo mientras su mandíbula encajaba perfectamente en la palma del demonio. Los pulgares del demonio se deslizaron a lo largo de sus suaves pómulos, acabando con la débil voluntad de JungKook. Si esto era una especie de juego, JungKook habría perdido. Se había dado por vencido.

No era que JungKook nunca hubiese amado, sino que más bien, nunca había tenido la oportunidad de amar. Las personas iban y venían y JungKook aprendió a nunca apegarse demasiado. Nunca había tenido este tipo de intimidad con otra persona, y nunca se encontró necesitándolo. Si alguien llegaba a su vida, llegaba.

El demonio se movió más cerca. La situación peligrosa y emocionante se coló profundamente en los huesos de JungKook. Todavía estaba muy consciente de los ojos azules; de los cuernos, la cola y los dientes afilados, pero sabía que más allá de la apariencia exterior había más en el interior.

ㅡ¿Cómo te llamas?

La criatura dijo algo que no sonó a nada que JungKook hubiera escuchado antes. Sonaba como una maraña de lenguas de algún antiguo folclore, demasiado largo y complicado.

ㅡLo siento, ¿qué?

Y cuando parpadeó, el demonio se había ido.





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Loving a Monster ❀ VkookWhere stories live. Discover now