Capítulo Veintiuno

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(ÚLTIMO)

Cuando Mayte sale elegantemente vestida con un traje largo color azul turquesa con un escote pronunciado en la espalda y algo sugestivo al frente. Manuel se quedó perplejo y asombrado ante la belleza de su mujer. Mayte al ver que Manuel apenas parpadeaba, se sonríe al saber el efecto que causó en él.
M: Mi amor, y ¿Cómo me veo?
Ma: Mayte, mi amor, te ves más hermosa que de costumbre, tu belleza me parece imposible compararla porque para cuando te crearon tus padres rompieron el molde, eres única. No sé qué voy a hacer cuando todos los hombres te miren, me van a dar celos. Te quiero todita para mí.
M: Mi amor, yo soy toda tuya. Y si me vestí así, al único hombre que quiero impresionar es a ti, mi hombre ideal. Te amo, además si de celos hablamos, voy a tener que lidiar con las mujeres que te van a querer comer con la mirada.
Ma: Mayte, con solo que estés a mi lado y marques tu terreno va ser suficiente para que las mantengas a raya. Además solo tengo ojos para ti.
Manu se percata que Mayte sostenía en sus manos además de su cartera, una cajita envuelta en papel de regalo.
Ma: Mi amor, y ese regalito que sostiene en las manos ¿Para quién es?
M: Manuel, este regalito es para ti, porque para mí eres el mejor novelista del año. Me siento la mujer más orgullosa del planeta. Y la felicidad que siento en mi corazón es tan grande, que aunque quería dártelo después de las premiaciones, la verdad que estoy ansiosa y quiero que veas lo que hay adentro (entregándole el regalito)

Manuel al recibir ve que el tema del papel de regalo era de pequeños biberones y mamaderas de bebes y con suspicacia abre la cajita y ven en ella una prueba de embarazo utilizada y con dos rayitas azules en el resultado. Manuel dirige su mirada hacia Mayte que la recibe con una amplia sonrisa.
M: Mi amor, vamos a ser papás.
Ma: ¿Cómo? (le dice asombrado y con una lágrima asomándose y corriendo a través de su rostro)
M: Manuel, estoy embarazada.
Ma: Mi amor, Te amo, te amo con el alma, Mayte, me haces el hombre más feliz del universo. Mi corazón está a mil por hora.
Manuel levanta a Mayte dándole una vuelta para luego besarla profundamente.
Ma: Mayte, ¿cuándo te enteraste?
M: Esta mañana, hace varios días he sentido algo de nauseas hacia varios alimentos, he han dado ganas de comer helado de frutillas, cuando mi preferido es el de chocolate. Cuando ayer se lo comenté a Isabel, ella misma, me trajo un test de embarazo para que me lo hiciera y no fue hasta hoy que me lo hice, aún no le he dicho el resultado, quería que fueras el primero, me matará (se sonrió entre dientes)
Ma: Si no nos tuviéramos que asistir a la premiación te llevaría ahora mismo hasta el firmamento, solos tu y yo...
M: No te preocupes que cuando lleguemos celebramos por partida doble.
Ma: Mayte, no me importa si gano o no el premio, tengo a mi lado los dos trofeos que más quiero a mi lado (poniéndole la mano sobre la barriga) a ti, el amor de mi vida, y a nuestra hija, fruto de nuestro amor.
M: Mi amor aún no podemos saber el sexo del bebé.
Ma: Estoy seguro que es una niña, recuerda cuando te conté sobre el sueño que tuve donde te veía con una niña guerita sobre tus piernas con tu sonrisa, y que sonrisa (dándole un beso)
M: Bueno, bueno (parando un poco el beso), vamos que llegamos tarde.
Ma: si vamos.

Ellos se fueron directo al Centro de Convenciones de la Ciudad de México, donde tendría lugar la entrega de premios. Manuel finalmente obtuvo el premio de Escritor del Año. Luego de la actividad, fueron invitados a una actividad post premiación, que muy gentilmente Manuel agradeció la invitación aunque declinó, excusándose debido tenía otro compromiso.

Una vez iban de camino, Mayte se percata que Manuel se desvía hacia otro lugar.
M: Mi amor, ¿a dónde vamos?
Ma: Es una sorpresa, nos vamos de fin de semana a un lugar espectacular.
M: Me encanta tu sorpresa. Manuel pero no vinimos preparados.
Ma: No te preocupes, mi amor, mi cuñasa me ayudó y te preparó una maleta con algunas de tus pertenencias personales, aunque te aseguro que mucho no las vas a necesitar.
M: ¡¡¡Manuel!!!
Ma: Que, Mayte me muero por hacerte el amor cada instante de nuestras vidas.
M: Sabes, me encanta tu idea.

#El Hombre Ideal#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora