Capitulo 26: La despedida que merecian

962 62 9
                                    


"¡Hayato!" El moreno corrió hasta su amigo sonriendo como siempre junto a un animado peliblanco agitando los puños "¡Estas temprano!"

"Como siempre, friki del béisbol" Resoplo frunciendo el ceño, aunque ya acostumbrado a la compañía de los otros en la madrugada. Todavía recordaba el día en que estas 'actividades en equipo' comenzaron. Estaba devastado por la desaparición de su jefe, por lo que comenzó a alejarse de los otros sin siquiera notarlo, entrenando diariamente en solitario, fortaleciendo sus llamas y a Uri.

Eso, hasta que un día por la mañana un idiota pelinegro irrumpió en su departamento gritando algo sobre el compañerismo y ejercicio madrugador. No entendió nada, solo que el resto del edificio termino quejándose por ser despertados a las 6 de la mañana un fin de semana.

Desde entonces cada día el moreno iba a buscarlo a la misma hora y se unían a trotar con Ryohei. No le había gustado la compañía de los otros al principio, pero luego entendió que, si quería ayudar a su jefe y no volver a pasar la misma vergüenza contra otra Famiglia nuevamente, debería entrenarse en muchos más sentidos, no solo como lo había estado haciendo.

Así fue como terminó entrenando con los otros cada día, incluso ahora en Italia.

"¡AMBOS ESTAN TEMPRANO!" No pudo evitar una mueca en la voz alta del peliblanco, podrían llevar tiempo juntos, pero eso no significaba que ya se había acostumbrado a sus gritos

"¡No levantes la voz! ¡Podrías despertar a Juudaime!"

"Maa Maa Hayato, no te pongas gruñón"

"Es más ¡Deberíamos invitar a Sawada a correr con nosotros!"

"Senpai ¡Esa es una gran idea!"

"¡No! No no no no no y ¡no!" Cruzó los brazos "No dejare que vayan a molestar el tranquilo sueño de Juudaime"

"Gruñón" Ambos murmuraron.

"¿¡Van a entrenar o se quedaran parados como idiotas!?" Comenzó a correr en dirección contraria sin esperar sus respuestas, segundos después podía sentir sus pasos tras de él junto a sus risas. 'Idiotas'

*

"Hacía ya mucho tiempo que no me invocabas, Decimo" Miro al castaño que admiraba el jardín frente a él

"Lo dices como si fueras un demonio ¿Acaso debo dibujar un circulo de invocación? Por favor, no me digas que eso significaba la cresta de Vongola" incluso con el tono burlesco en sus palabras, sus ojos seguían sin un punto fijo, su mente en otro lugar o recuerdo.

"Ja ja" Su sarcasmo evidente mientras cruzaba sus brazos "Muy graciosito ¿No? En vez de jefe mafioso deberías dedicarte a la comedia, ganarías mucho mejor que en esto"

"En si no me pagan nada"

"Decimo..."

"Ya se... lo siento mucho. No había encontrado el valor de llamarte... no desde aquella tarde"

Miro al jardín "Eso fue hace ya un año ¿Verdad?"

Sonrió con ironía "Creo que esta fecha es la más oscura para mi ¿no crees? En esta fecha que Enma y su Famiglia nos atacaron acusándonos de traidores, dos meses después hui. En esta fecha hace un año el escondite fue atacado y casi todos murieron. Me pregunto si hoy volverá a pasar algo trágico" Miro al otro "¿Tu qué crees? Primo"

Él sonrió con pesar "Creo que cada año te haces más tétrico" El castaño estrecho sus ojos "¿Qué? No me has contactado en un año ¿Esperabas acaso una felicitación?" Puso una mano en su cabello revolviéndolo, llenándole de un calor fantasmal que extrañaba "Eres el descendiente más malcriado que eh tenido"

(KHR)Cielo ProtectorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora