El Sueño De Mateo

Cuenta la historia...

(o sea, cuenta mi abuela), que dos aventureros personajes (pff, ¿aventureros?) estaban realizando otra de sus legendarias hazañas (¿lasaña? ¡¿dónde?!), agotados por sus grandes acciones quedaron dormidos y comenzaron a soñar (como no soy hipocrita les voy a contar lo que realmente pasó, el idiota estaba con Mon en el parque y le dio sueño y se durmio, fin... oh, tranquilos... aqui no termina la historia... bueno, no me pagan... tal vez... ña, olvidenlo, me encanta hablar de idiotas, siempre hablo de mi)
En el sueño Mateo y Mon estaban en una casita hecha de manzanas (ESA ES MI CASA, YO TENGO LOS DOCUMENTOS... ¡ME LA DAN!... sí ya lo sé, estos no son los documentos, es la lista de compras... es que, ¡quiero un a casa comestible!, y acá no me dan nada que no sea trabajo), como ellos tenían mucha hambre, comenzaron a comer unas cuantas manzanas (ellos no juegan con la comida, fueron bien entrenados, ¡pero dejen algo para su sensei!), de repente apareció un hada, la dueña del lugar, y los llevo dentro de su casita de manzanas (esto me huele a plagio, y no creo que sea mi gaseosa Coca-Trasero, este es un olor mucho peor... a quien engaño, esta Coca-Trasero huele horrible), por dentro la casa era más grande y estaba llena de aparatos de ejercicio y comidas saludables (en síntesis, ese era el infierno de Mateo), el hada les dio de comer las cosas mas saludables, llenas de proteina, vitaminas y nutrientes, y obligó a Mateo a hacer ejercicio (¡NO!, pobre, ha de estar sufriendo allí,... que se quede veinte años más), y a Mon la obligó a jugar con un estambre de lana (que se quede veinte años más).
Mateo estaba cansado, (este es el estado del idiota luego de hacer cinco flexiones), asi que ideo un plan de escape con Mo, (¿qué cómo la convenció?... si un imbecil que llegó a comer hasta comida de perro, te dice que la comida saludable es asquerosa, obviamente te quedarias convencido de lo que dice, es más, hasta yo escaparía... Y ESO QUE AMO LA COMIDA), así que comenzaron a pensar en un plan de escape; luego de un corto tiempo, ya lo habian ideado todo, (¿tán rápido?, es obvio que el cerebro ahí es Mon... un momento... Mon no habla... eso significa que... ¡Mateo pensó!), el plan consistía en que la gata enterneciera a el hada, mientras tanto, Mateo agarra las llaves, abre la puerta y llama a Mon para huir hacia la libertad.
Comenzaron su plan; Mon puso su cara mas tierna a el hada (aww, pero sólo hacía falta que pusiera su cara normal, no que la llene de azúcar [no literal], si alguien la mirase tendría diabetes [cabe decir que Mateo estuvo a punto de literalmente llenarle la cara de azúcar, pero luego de unos minutos] horas [decidio que lo mas prudente para convencer a un hada saludable, seria sin azúcar] idiota) , Mateo se dirigió hacia las llaves, pero (el muy idiota) tropezó y presionó un botón por accidente; el botón preguntaba si queria irse (también quiero ese botón lee mentes... no mejor no... podria despertar a mis vecinos con mis gritos mentales). El hada se acercó con Mon y le hizo la misma pregunta. Dijo que sí y se fueron de la casa con un regalo del hada: una canasta con manzanas (que robaré, quiero decir, pediré prestado cuando Mateo despierte).
Despertaron y el entrenador que estaba dando clases por el parque, los reprimió (qyyia dgigr ... perdón, me olvide que era de mala educación hablar con la boca llena de comida)
Y vivieron felices, y comieron perdices (puag, que asco, ¿que como se que es asqueroso? Porque a veces me como algo del menu de Mateo)