Aléjate pervertido

Capitulo 4

Un dolor fuerte de cabeza era como mil golpes en ella, era lo que al más pequeño de la clase le pasaba. Soportando cada día a su compañero de asiento, todos los días se pregunta ¿Por qué no se cambia de asiento si hay muchos allí? Claro, me cambio yo y el me sigue, maldito pervertido—Pensó—.

¡Hey! ¡Hey! ¿Enano?.—Exclamó Seungcheol, al parecer jihoon a estado mucho tiempo en las nubes.

—¡QUEE!.—Gritó ya cabreado, pero en un par de segundos su cuerpo se puso débil hasta sentir como se aproximaba al suelo; eso no pasó, Seungcheol logró atraparlo en su brazos, cargándolo como toda una damisela.

No pudo regañarlo ya que ni el habla era su fuerza hasta el momento. Todos observaron alarmados a esos pares y el desmayado y débil de jihoon, hasta que de inmediato lo derivaron a la enfermería.

Una hora después..

Los ojos del pequeño jihoon eran abiertos a medida que sus sentidos estuvieran de vuelta, observando que estaba en una sala blanca sin ningún ruido en ella. Dio media vuelta su rostro y se encontró con su detestable compañero de asiento, pero este estaba en los profundos sueños a su costado de la cama.

Jihoon pudo recordar todo lo sucedido, la verdad fue que no era culpa de su compañero, era por no haber comido y estar concentrado en sus estudios universitarios, muchos exámenes lo tenían ya estresado, eso lo conllevo al desmayo.

—S-Seungcheol..—Murmuró llevando su pequeña manito a el hombro ajeno, moviendo al contrario para que despertara, notando como esta se levantaba adormilado y le esbozaba una amplia sonrisa que hizo su estómago sentir miles de nervios ¿Por qué si solo era un pervertido?

—Despertaste bella durmiente.—Comentó aún adormilado el más alto.

—Cállate y g-gracias por traerme aquí.—Dijo apenas  ya que era difícil para el agradecer a personas que no le importaban nada.

—Pensé que eras sólo un gruñón, pero ahora se que en el fondo de tu corazón eres adorable y tierno.—Mencionó, dejando a jihoon en silencio por unos minutos.

—Seungcheol tu..—No alcanzo a decir ya que la puerta se abrió de un fuerte golpe, notando como tres personas entraban de inmediato y se acercaban al pequeño en camilla ya estable.

—¡Mi bebé!.—Exclamó Dk.

—¡Woozi!.—Grito el dramático de Seungkwan.

—¡Pitufo!.—Exclamó hoshi.

Todos alarmados se tiraron encima de pequeño cuerpo de la bella durmiente, pero eso sólo duro segundos ya que su compañero y príncipe Seungcheol saco a lo es tres de encima, con todo su ceño fruncido.

—¡Acaso no ven que recién despertó y se tiran encima! Se supone que son sus amigos, deberían estar cuidándole, seguro no a comido.—Exclamó Seungcheol para aquellos tres, mientras que jihoon tomaba el brazo de su protector y dedicarle una mirada de "Estoy bien".