Capítulo 4

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-Wolfram-

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"Vamos a ver si lo entiendo. Cuando me desperté esta mañana, ¿no estaba en mi cuerpo?"

—Correcto —contestó el Maou.

"Conrart no me estaba llamando a mi 'Su Majestad', sino que estaba llamando a Yuuri. Y en realidad eras tú corriendo con mi hermano. Y era Yuuri en mi cuerpo sacudiéndome, diciendo mi nombre y pidiéndome que despertara."

—Correcto.

"No hay duda de porque mi otro yo estaba actuando tan enclenque. ¿Cómo es que no fuiste con él? ¿Por qué estas atrapado aquí conmigo? ¿Y cómo es que eres tú el que tiene el control y no yo?"

Me encontré con el silencio.

"¿Estás intentando hacer algo que el Yuuri enclenque no te deja? ¿Algo que quieres y él esta suprimiendo?"

Más silencio.

Podría haber cruzado mis brazos y dicho un "¡Hump!" disgustado, pero el Maou aun tenía el control del cuerpo de Yuuri. En este momento, estábamos mirando a Yuuri que estaba en mi cuerpo, y que había estado mirando por la ventana. Solo podía asumir que estaba preocupado por Conrart.

—¿Porque estáis desanimado?

"¿Ahora hablas?"

—Nuestro amor por vuestro hermano difiere de nuestro amor por vos.

"Aparentemente."

—Él está mirando su reflejo —su voz era casi gentil cuando lo dijo.

"¿Como podrías saberlo?"

—Él y yo, nosotros, somos la misma persona.

"Entonces ¿qué es lo que buscas exactamente? ¿Por qué no me dejas tener el control de este cuerpo?"

No hay respuesta.

—¡Hump! —dije. Y casi me caigo de la silla cuando me di cuenta de que fue en voz alta. Crucé mis brazos. Rodé mis ojos. Mire hacia el techo. Golpee con el pie. Me levanté y salté.

"¡Por fin!" pensé en mi interior.

Para este momento, todos en la habitación me estaban mirando. Tomé la muñeca de Yuuri y lo arrastré hacia la puerta de salida.

—Su Majestad —gimió Günter—, no hemos terminado con sus clases...

—Lord von Christ —dije prepotentemente—, espero que usted, de toda la gente, comprenda mis necesidades, en especial las específicamente relacionadas con mi prometido.

Por una vez, Günter se había quedado sin palabras. Sonreí en mi interior. Nos fuimos antes de que alguien pudiera detenernos. Cuando llegamos a nuestra habitación, azoté la puerta y la cerré.

—¡Tú! ¿Quién eres tú? —lloriqueó mi prometido cuando lo deje ir.

—¡Quién crees, enclenque!

La cara que conocía de toda mi vida, la que él estaba usando, esa cara, se transformó en alegría cuando escuchó mi apodo favorito para él.

—¡Vos sois hermoso! —la voz profunda del Maou flotó suavemente en mi cabeza.

"Ahora no. Tengo que hablar con tu otro yo. Y sin interrupciones esta vez."

En ese momento, Yuuri me había agarrado y me abrazaba con fuerza—. ¡Wolf! ¡Wolf! Estas ahí. Dios, pensé que te había perdido y que algún espíritu malvado había tomado mi cuerpo.

Kyou Kara Wagamama PuuNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ