Capitulo 28

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Estaba en el sofá acostada sin hacer nada de provecho, viendo un partido que por el momento no parecía muy interesante esperando a que pasaran las horas para que llegaran las nueve para ir a la gran fiesta supuestamente Ari, según ella iba a estar llena de famosos, cantantes, deportistas, pero a mi no me importaba, que mas me daba que estuviera llena de famosos si yo iba a ser la misma chica de siempre, apague la televisión cansada de pasar canales y no encontrar nada entretenido que ver, fui a mi habitación a empezar a arreglarme, no quería ponerme muy extravagante pero tampoco quería que pensaran que no sabia arreglarme  por lo que opte por ponerme un vestido negro, cuando ya estaba apunto de terminar de maquillarme tocaron a la puerta de mi habitación y entro un elegante chico de pantalón negro con camisa blanca.

Erik: No hace falta que te arregles mas, no quiero que todos te miren - dijo besándome.

Tami: Dejame terminar de maquillarme - dije apartándolo ya que me estaba estorbando para que no siguiera.

Erik: Ya estas perfectas, ya te van a mirar todos los hombres de esa fiesta y eso no puede ser porque tienen que saber que eres mía y que nadie puede tocarte.

Tami: No soy un objeto Erik para que te tengas que preocupar de si alguien se me acerca o no, yo se perfectamente a quien quiero - dije levantándome enfadada llendo ir camino al coche para irnos.

No dijimos nada en todo el camino hacia la fiesta simplemente iba escuchando la música de fondo y mirando por la ventana.

Erik: No quiero que estemos enfadados por una tontería - dijo agarrándome del muslo impidiéndome que salga del coche.

Tami: Si para ti es una tontería tratarme como un objeto que puedes manejar a tu gusto y decir lo que tiene o no que hacer bien por ti, pero para mi no es ninguna tontería - dije finalizando la conversación y saliendo del coche.

Entre al recinto buscando a los chicos para acercarme a ellos pero lo único que encontré fue un barullo de gente bebiendo, busque con la mirada a los chicos durante un rato hasta que los encontré en una esquina, me acerque a ellos y pude ver que Erik ya estaba allí con ellos, me acerque a Eve ya que la veía un poco distraída.

Tami: ¿Qué tal vas?

Eve: Vamos a por unas bebidas, con alcohol todo se lleva mejor - dijo agarrando mi mano y dirigiéndome a la barra.

Pedimos unos margaritas y empezó a contarme.

Eve: Te acuerdas que te dije que pensaba que me estaba engañando - asentí con la cabeza - pues todo había sido imaginación mía, estaba hablando con su hermana pequeña y yo le monte un espectáculo diciéndole que como se atrevía a engañarme, entonces el me dijo que veía que no confiaba en el y nos peleamos hasta el día de hoy que no hemos hablado ni siquiera dirigirnos la mirada - dijo mirando el suelo.

Tami: Tranquila, si os queréis todo se solucionara, solo tienes que intentar hablar con el y pedirle perdón por desconfiar de el, explicarle el porque pensaste eso y ya esta.

Eve: No todo es tan fácil.

Tami: Ya pero tienes que intentarlo.

Volvimos al grupo después de haber pasado un rato en la barra bebiendo y hablando, cuando llegamos con los demás me pareció raro no ver a Erik con los demás pero no me preocupe, habría ido a bailar o a pedir algo a la barra, me levante y fui al baño ya que no me aguantaba las ganas después de haber bebido tanto, cuando entre oí ruidos, pero tampoco le di mucha importancia seria alguna pareja que se tendría ganas, fui a lavarme las manos, estaba apunto de salir cuando oí un "Erik" por parte de la chica que estaba dentro el cuarto de baño, en ese momento no supe lo que hacia y abrí con todas mis fuerzas aquella puerta encontrándome con lo que menos quería ver, a Erik montándoselo con otra, salí corriendo de aquel cuarto de baño acercándome al grupo.

Tami: Ari llevame a casa por favor- dije mientras sollozaba.

Ari: ¿Tam que te ocurre? - dijo preocupada.

Tami: Solo sácame de aquí por favor- Ari asintió y se despidió de Max con un beso diciéndole que luego hablarían.

Montamos en el coche con un silencio espantoso, sentía tristeza pero lo que mas sentía era rabia por haber confiado en el, en un mujeriego que lo único que quería era enamorarme y romperme el corazón y para mi desgracia lo había conseguido.

 

Um jeden Preis (Erik Durm) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora