Capítulo 8: "Un maravilloso fin de semana"

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Milk había acabado las grabaciones con su amigo camarógrafo y se encontraban revisando los vídeos para guardarlos en un maletín.

Quedaron fabulosos, decía la pelinegra.

Señorita Ox, ¿usted hoy volverá a la capital?, dijo el hombre.

¿Por qué?, dijo la pelinegra.

Es que yo quiero quedarme a conocer el pueblo, aprovechando el fin de semana, decía el hombre.

No te preocupes, nuestro trabajo termino aquí, ahora cada quién en su fin de semana puede hacer lo que quiera, solo no se te olvide llevar todo el lunes, dijo la pelinegra.

Y usted ¿qué hará señorita Ox?, dijo el joven.

Iré a conocer Paoz, me llevare la cámara para grabar, dijo la pelinegra.

¿Pero quién le firmara?, dijo el joven preocupado.

Iré con un amigo, él me ayudará, dijo la pelinegra.

Ya entendí, señorita Ox, disfrute su fin de semana, dijo el camarógrafo.

Minutos más tarde:

El joven de cabello alborotado tocaba a la habitación de la bella pelinegra.

Ring ring ring

La pelinegra abrió la puerta y saludo al jovencito con un beso en la mejilla, tomo su pequeño maletín y salió con el del edificio.

Playa:

¿Entonces Kakaroto está de viaje todo el fin de semana?, decía Vegueta intrigado.

Sí, fue a algo que le dijo su maestro, decía la peli azul sin acordarse bien el lugar dónde Gokú le dijo que iría.

¿Y cuando vuelve?, dijo Vegueta.

El lunes, dijo la peli azul sonriendo, mientras se colocaba bloqueador en sus brazos.

Entonces tenemos todo el fin de semana para los dos, dijo Vegueta sonriendo.

Así es, dijo Bulma.

Estupendo, la pasaremos de lo mejor, ya lo veras dijo Vegueta dándole un apasionado beso a la peli azul.

Capital este:

Una bella jovencita pelinegra miraba asombrada un bello auto de color azul.

Lo alquile para ir a Paoz, dijo Gokú sonriendo.

Está muy lindo, dijo la pelinegra.

Quise alquilar una moto, pero luego me acorde que el camino es un poco accidentado, dijo Gokú riendo.

¿Una moto?, como en la universidad, dijo la pelinegra en voz alta.

¡Eh¡ si, ya sabes que me encantan las motos y sobre todo la velocidad, dijo Gokú, haciendo sonreír a Milk, al acordarse la forma en que comenzó su amistad con Gokú.

Gokú abrió la puerta del auto para que la pelinegra subiera, luego el hizo lo mismo y emprendió camino. Después de una hora estaban entrando ya por el caminado de la montaña, todo era hermoso, la vegetación, aves y animales salvajes adornaban el paisaje que era captado por la cámara de la pelinegra, que como una niña sonreía al ver el maravilloso lugar.

¡Es hermoso¡ dijo la pelinegra.

Y eso que aún no conoces el lago, dijo Gokú sonriendo.

¿Hay un lago?, dijo la pelinegra.

VUÉLVEME A QUERERWhere stories live. Discover now