SUPREMACY

Kathleen :

Lunes por la mañana, ayer en la noche mi madre llegó "sorpresivamente ebria" a mi casa, no tuve opción más que dejar que se quedara, en fin, me levante, me puse mi ropa deportiva, tome una manzana, me puse mis auriculares y salí a hacer mi rutina, caminé hasta el parque, se me hacia raro no ver a nadie, es temprano, pero normalmente siempre hay gente aquí ya que tienen que trabajar después, incluso la construcción de la esquina estaba vacía, no le di importancia y comencé con lo mío, me estiré un poco y luego comencé a trotar, luego de unas vueltas, me detuve para estirar un poco más y comenzar a correr, fue entonces cuando por fin apareció alguien, al otro lado del parque, no podía verlo bien, pero vaya que caminaba lento, se dirigía hacia donde yo, seguí con lo mío y corrí unas cuantas vueltas, cuando iba a dar la última para ir a casa, un auto descontrolado apareció repentinamente estrellándose en el árbol que estaba justo enfrente de mi, por suerte reaccioné a tiempo y me aventé hacia atrás, la puerta del conductor quedo abierta y el sujeto quedo estrellado en el volante, inmediatamente llame a emergencias y en lo que contestaban me acerque para revisar su pulso, pero al momento de tocar su cuello mis dedos se mojaron, rápidamente los quite y estaban llenos de sangre, nadie contestaba en la línea, cuidadosamente hice su cabeza a un lado y me lleve una gran sorpresa al ver una Gran mordida

-pero que....?.... No, no puede ser

El sujeto comenzó a convulsionar, me fui haciendo para atrás y colgué mi celular para después guardarlo en mi bolsillo, el tipo salió del auto con un aspecto pálido y sus ojos eran amarillentos, casi rojizos, empezó a caminar lentamente hacia mi, sabía perfectamente lo que era, pero me negaba a creerlo, miré a todos lados y en el césped vi un fragmento de metal

-bien, justo como en las películas

Sin dudarlo lo tomé y se la enterré al sujeto entre las cejas, recordé al "anciano" mire hacia atrás y ya estaba frente a mi, lo golpeé en la cabeza con el metal y salí corriendo directo a mi casa.