Solsticio

Capítulo 11.- Pasado y Presente.

Todos los personajes reconocibles y escenarios son propiedad de sus respectivos autores, en este caso Stephenie Meyer. Los personajes originales y la historia son propiedad del autor. El autor no está asociado con el dueño, creador o productor de la saga. No se busca violar los derechos de autor o copyright.

Capítulo 11.-Pasado y Presente.

Maya POV

Ha sido una larga noche y todo el rato hemos tenido los nervios de punta desde que dejamos a los Volturi atrás en la cabaña y comenzamos a correr. Necesitamos poner la mayor distancia posible entre ellos y nosotros, eso no lo íbamos a lograr con mi velocidad actual, por lo tanto William me está cargando en su espalda. Por lo general me quejo de este tipo de situaciones, pero hoy es una necesidad. No ha dicho nada por un rato, simplemente continua corriendo.

-¿A dónde nos dirigimos Maya?- considerando el ruido por el viento y su velocidad es necesario que grite.

Noto la ansiedad de su voz.

-¿A qué te refieres?- le grito de regreso para que me escuche.

-¿Recuerdas el paquete que te di que escondieras para el caso de una emergencia?- entiendo a qué paquete se refiere.

-Oooohhhh- aún recuerdo la estatua en donde metí el paquete.

-Bueno, pues este es uno de esos momentos y necesitamos desaparecer.

Tengo duda de decirle donde está, recuerdo que me dijo claramente que no le revelara en donde lo escondí.

-¿Maya?- su voz nerviosa.

-Está bien- le respondo de mala gana – necesitamos dirigirnos a la frontera de Canadá y de ahí….

- Maya- me interrumpe - no me digas nada más hasta que estemos ahí.

Es de noche y nos encontramos en los suburbios de la ciudad, en un fraccionamiento donde todas las casas están bien alineadas, con sus cercas blancas y sus jardines bien cuidados, lo carros en sus cocheras. A lo lejos hay un hombre paseando a su perro; se detiene cuando comienza a ladrar como loco debido a nuestra presencia. William se detiene y nos escondemos detrás de unos arbustos. Escucho al hombre blasfemar y alejarse, posiblemente jaloneando al perro que continua con sus ladridos. Una vez que los dejamos de escuchar, William me voltea a ver. Me susurra muy bajo, dudo que algún humano sea capaz de escucharlo.

-Necesitamos buscar otro medio de transporte, uno que no deje evidencia de nuestro aroma como es el caso de un carro.

Asiento con la cabeza; él sabe que odio robar.

-Debido a que en este momento, no tenemos ninguna otra opción, tenía en mente ese – señala con su dedo al carro estacionado frente a nosotros, un BMW M3 E93.

Le encanta ver en internet diferente tipo de información, entre las cuales son los carros. De hecho le fascinan, en especial los rápidos y caros, lo entiendo, a mí también me gustan.

-Esa es una opción, pero ese se ve mucho mejor- muevo mi cabeza a un Audi Spyder rojo que está estacionado en la casa cruzando la calle. Después de todos necesitamos ser rápidos.

Veo en su cara el dilema que está pasando su mente, sabe que el Audi va a ser más rápido y va disfrutar manejarlo más que el BMW, si yo supiera manejar me inclinaría por este.

-Por favooooorrrrr- le digo tratando de inclinar su decisión hacia el Audi.

- Que tal si en esta ocasión escogemos uno un poco más promedio, no queremos que la policía nos siga y los Volturi sepan en donde estamos.