—Hola!! Que gusto verlos aquí —saludó entusiasmado a Heriberto y luego a Victoria.

—Ricky ¿cómo te fue en la graduación?

—Fue fantástico. No puedo creer que me haya graduado de la Universidad. ¿Cuándo es la graduación de Max?

—En un par de semanas más.

—Menos de dos semanas —le corrigió Victoria

—Me imagino que las chicas van a ir

—Ni muertas se pierden la ceremonia, han tenido al pobre Pipino trabajando exhaustivamente en los vestidos y el traje para Max —Decía Antonia emocionada.

—Ellas están ansiosas y más que nada muy orgullosas de su hermano.

—Y ni que decir de ustedes que son los padres, conozco el sentimiento —Oscar miró a su hijo orgulloso.

Victoria mira hacía un lado y ve a Leonela Montenegro, mujer bonita de unos 25 años, ella llevaba un pareo sobre un traje de baño y viene directamente hacia ellos, ésta tenía un plato con una rebanada de pastel. Victoria se siente instantáneamente distraída e incómoda. Claro, se trataba del motivo por el cuál su matrimonio se fue directo a la basura.

—Felicidades de nuevo... –se enganchó del brazo de Heriberto. Gran fiesta —decía mirando alrededor.

Platicaron un rato, Ricardo abandonó el grupo y Victoria observó el cuadro, se sintió fuera de lugar a pesar de que se trataba de sus mejores amigos, terminó de beber su vino y aceptó otra copa que un mesero le ofreció. Decidió irse.

—Creo que ya voy a irme —le decía a su amiga.

—Te vas? Vicky pero si apenas vamos a la mitad de la celebración —dijo con pesar Oscar.

—Déjala Oscar, no hay problema Victoria –Le sonrió, sabía la razón por la cuál Victoria prácticamente quería huir.

Leonela le da un bocado de pastel a Heriberto mientras reían, Victoria contuvo la respiración... conocía a la perfección lo que sentía y creyó estar volviéndose loca.

—Nos vemos en Nueva York. –se despidió Heriberto

—Absolutamente —fingió una sonrisa.

—Victoria, ¿qué vas ponerte para la graduación? –Le preguntó para retenerla-

—No lo sé Leonela, algún vestido seguramente.

Victoria sonríe con fuerza, levanta las cejas a Antonieta.

—Nos vemos allí, Tory.

Ambos se miraron por unos segundos, Victoria de manera seria puesto que no le gustó que la llame por su viejo apodo.

—Espera Victoria, ¿dónde vas a hospedarte?

—En el Park Hyatt –Le dijo fastidiada. Tú estarás en el The Four Seasons ¿cierto? me lo comentó Fernanda.

—No, cambiamos de opinión también estaremos en el de ustedes porque será mejor estar cerca de los chicos —sonrió Leonela con burla.

Es... Complicado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora