-Cada día es más difícil. (Madre)

Te necesito.

Siempre ha sido y seguirá siendo una lucha conmigo misma.
Cada día la extraño más, y ahora en mi adolecencia no logro explicar como me he sentido.

Sólo imagino como hubiera sido mi vida al lado de la mujer que me dio la vida.

Me hubiese encantado que ella me aconsejará en esos días en los que no sabia si podía seguir adelante, esos días en los que sólo necesitaba de alguien que me brindará un abrazo, que me escuchara, que jugará conmigo, así como lo hacían mis vecinos con sus hijos. Esos fines de semana sólo me la pasaba observando desde mi ventana lo felices que eran mis vecinos.

Me hubiera gustado muchísimo compartir mis tristezas, mis alegrías, mis triunfos, y que tú estuvieras conmigo en las entregas de menciones de honor en el colegio, me siento mal cuando miro a todos mis compañeros con sus madres felicitándolos por los reconocimientos que se le otorgan por sus excelentes calificaciones, lo único que yo hago es observarlos, pero yo sé que tú me ves desde el cielo y que tal vez estas orgullosa de mi.

He tenido algunos inconvenientes con los chicos y chicas del colegio, porque siempre se han aprovechado de mi, sólo se hacen pasar como mis amigos por interés.

Algunos me criticaban en la escuela, me decían cuatro ojos por mi condición, tengo un problema con mi visión así que necesito mis gafas.

Muchos se reían de mi porque no soy muy buena socializando con las demás personas.

Gracias a Dios siempre he tenido el apoyo de la ex novia de mi padre, la chica que se había ido a España, ella se ha convertido en un apoyo para mi, siempre me ha escuchado y me ha a aconsejado en mis peores momentos, agradezco a Dios por haberla puesto en mi camino.

Ah, y y lo más importante es que hace unos meses llegó a mi ciudad y he ido a visitarla, sin el concentimiento de mi padre, porque mi madrastra le dijo que me prohibiera hablar con su ex novia, pero a mi no me importa quien esté en contra de nuestra amistad.