Citius, Altius, Fortius

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Con un mal sabor de boca, me encaminé hacia el comedor, guiada por las indicaciones imprecisas y confusas de Darian, y tras discutir unos minutos otro veterano que pasaba por ahí nos indicó el camino correcto.

Mientras caminaba a paso ligero por los estrechos pasillos, con Darian detrás mío mirando al suelo, yo me sentía frustrada por no saber qué había hecho yo para que Dar me echara una bronca semejante.
Esta extraña tensión se mantuvo unos dos minutos, hasta que Darian aceleró para colocarse a mi lado, con una sonrisa que le devolví agradecida.

-Lo siento, pelirrosa. No debí ponerme así contigo -suspiró-.
Supongo que tocaste mi parte sensible. Todos tenemos un punto débil, ¿no?
-Ah, ¿sí? ¿Cuál es el mío?
-Tu debilidad soy yo, está claro. Mi corpulento cuerpo de culturista es tu kryptonita -sonreí, mirando sus brazos flacuchos.

Esperé unos segundos y, todavía incómoda, proseguí:
-Entonces, ¿todo en orden? ¿No estás enfadado?
Negó con la cabeza, y yo suspiré.
-Menos mal, no soporto tener a la gente enfadada conmigo.
Dar echó una carcajada.
-Eres una ingenua, pelirrosa. Con esa filosofía no llegarás a ningún lado.
El éxito no se mide con los amigos que haces, sino con los enemigos que consigues.
-Lo que tú digas. Al contrario que tú, Míster Peligro, duermo mejor cuantas menos personas estén intentando matarme, que por el simple hecho de estar hablando contigo ahora mismo, calculo que son bastantes.
-Eso significa que soy muy exitoso -sonrió.

Continuamos hablando de cosas intrascendentes hasta que alcanzamos el comedor, que me dejó maravillada a pesar de que Dar ya me lo había descrito con exactitud.
Darian me guió hasta la mesa donde se sentaban Josh y Sophie, quienes me dieron los buenos días a su manera.
-¡Buenos días, Diana! -comenzó Sophie-. ¿Has dormido bien?
-Perfectamente -mentí. Ese maldito sueño me estuvo persiguiendo toda la noche, y a pesar de que había dormido junto a Darian, había sido una noche bastante horrible.
-¿Habéis terminado ya de fornic... -Sophie dió un codazo a Josh para que se callara- ...de comer?
-Podría preguntaros lo mismo, tortolitos -respondió Darian, y yo le di otro codazo.

-¡Atención, mierdecillas! -gritó una autoritaria voz que ya nos resultaba familiar-. ¡En pie!
Y, acto seguido, todos nos levantamos al unísono.
-Así me gusta, novatos -vaciló unos segundos, y prosiguió-. Como ya sabréis, el simple hecho de haber desayunado en esta nave es un privilegio mucho mayor de lo que muchos os merecéis. Pero no pensaríais que bastaría con pagar la cuota de acceso, ¿verdad? No, eso no funciona así, novatos.

Alcé la mirada y pude ver al sargento de pie encima de una mesa, con un soldado uniformado a cada lado de la mesa, tan rígidos que parecían estatuas.

Luego hubo una larga pausa en la que se dedicó a pasar la mirada por todo su público, durante la cual la mayoría de los observados giraban la cabeza al posarse los penetrantes ojos de Heatwave sobre ellos.
Tras ese incómodo momento prosiguió su charla:
-No, caballeros, tan solo 200 de vosotros tendrán hoy el honor de servir a una causa mayor que cagar sin mancharse el culo, y las pruebas de acceso se encargarán de cribar a esta maremágnum de inútiles que sois. Los cocineros han tenido que preparar hoy algo más de 5000 desayunos, comidas y cenas para todos vosotros, y creedme si os digo que mañana por la mañana, cuando comuniquemos los resultados de las pruebas, estarán aliviados de preparar 4800 menús menos.

Hizo de nuevo otra parada, para hacernos reflexionar sobre lo que acababa de decir.
-¿Alguna pregunta?
Un chico de piel color caramelo, y cabello rizo y corto preguntó:
-Los que no aprueben, ¿cómo volverán a la ciudad, puesto que estamos ya volando?

-De hecho, aunque la niebla matutina nos impida verlo, seguimos sobre la plaza principal, solo que 300 metros por encima, así permitimos que el comercio de la ciudad vuelva a su cauce habitual. En cuanto acabemos, los más débiles volverán a la ciudad, y les reembolsaremos el 90% de su tasa de entrada. Para los demás afortunados, esa tasa servirá para pagar su estancia en esta nave durante el periodo máximo de 10 años de servicio.
-¿Qué quiere decir con eso? -susurré a Sophie, mientras Heatwave seguía hablando.
-Cuando te unes al Leviathan, debes cumplir el mínimo de 5 años de servicio, pero sin embargo a los 10 años debes irte obligatoriamente. De no ser así, habría demasiada gente a bordo.
Asentí con la cabeza.

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⏰ Última actualización: Mar 29, 2018 ⏰

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