Enamorada de mi hermano?

Capitulo 8

*Noah*

-No me caes bien, pero necesito que me hagas un favor.- dijo James fulminándome con la mirada. Realmente no se que sucedía, pero estaba segura que no tenia idea sobre lo que había pasado en la escuela. Sus ojos estaban inmóviles, no hacían ni un parpadeo. Poco a poco fueron convirtiéndose su color tan blanco en rojo, se notaba el nudo en su garganta y poco a pocos aquellas pupilas celestes se inundaban poco a poco. Hacia el mayor esfuerzo para no caer en llanto, pero yo sabia que no podía aguantar mas.  Me pare de la silla y me puse atrás de el, apoyando mis manos en cada uno de sus hombros, y empece a masajearselos lentamente. Nunca nos caímos bien, pero en el fondo no podía verlo así. Yo nunca quise tener una relación tan alejada hacia el, pero el a diferencia mía si; o por lo menos es lo que yo creía. En un momento sentí como su pulso se aceleraba, y su  respiración entrecortada. Apoyo sus brazos en la mesa y la cabeza en ellos. Fui hasta la cocina, y le servía un vaso de agua, mientras el seguía llorando en la mesa. Cuando volví al comedor, el ya había desaparecido. A los segundos escuche un golpe desde lejos, que sin duda alguna venia de su habitación.

*James* 

Entre a mi habitación y empece a revolear por todos lados lo primero que se me cruzaba en el camino. Mis sabanas y almohadones, cada prenda de ropa que me hacia tropezar, mis libros, los CDs, hasta que en eso veo algo volar que venia de adentro de aquel disco de Avicci. Eran las entradas que me había regalado Brittany por nuestro aniversario. Entonces atrás de ellas veo una foto nuestra pegada. Mi recuerdo de ella hizo enfurecerme mas, y tire todos sus obsequios a la basura. Mi cuerpo temblaba, realmente no tenia idea de lo que sentía. Era una mezcla de estrés, bronca, nervios y muchos sentimientos mas que todavía no logro descubrir. A lo lejos escucho ruidos, alguien estaba subiendo la escalera. Estaba segura de que era Noah, ya que no había nadie mas en casa, y es la que menos quería ver en este momento. Estaba muy preocupado por Thomas y me molestaba que a ella no. Me molestaba saber como lo trataba con toda la vida que mi amigo esta siguiendo, todo los momentos malos que esta teniendo, y parecía que a ella no le importaba. Si, se que no lo sabe, hasta ni yo lo se todo por completo, pero nadie es tan estúpido como para darse cuenta que no andaba bien. O eso creía. Unos golpes en la puerta me conectan de nuevo a la realidad, y sin dejarme dos segundos para contestar abre la puerta. 

-Se que no me quieres, pero por favor James, necesito hablar bien con vos. Que es lo que te pasa? Que es lo que me querías decir?

*Thomas*

Noah todavía no realizo la visita, ni tampoco creo que la haga. Estaba avergonzado de mi, era el peor chico de todos los tiempos, nunca me querría así. Cada vez que lo pienso estoy mas convencido de que me tendría que haber quedado con ella. Estaba muy mal, y todos contestan mal cuando están tristes. Eso espero. No soportaba la idea de que me odiara solo por el estúpido acto que protagonice aquel día del chupón. Nunca me había comportado de tal manera. Pero estaba exhausto. La noche anterior no la había pasado bien. Todavía sentía el dolor de aquella quemadura que me había marcado mi madre con el cigarrillo en la espalda. Habíamos peleado muy duro y no sabia con quien descargarme. Por lo que la primera idea que se me cruzo fue emborracharme, tome tanto hasta el punto que a la mañana siguiente todavía causaba efecto en mi. Estoy realmente arrepentido, porque se que no me va a creer. Ella no me conoce y la primera charla que tuvimos no resulto nada buena. Su primera impresión de mi no iba a cambiar. Tenia que pensar en algo. Algo grande.