La Mision

6.5K 269 53
                                    

Natsu estaba aburrido y molesto llevaba 1 mes desde que regresaron a Fairy Tail y aparentemente todos se habian olvidado de el

Nadie lo invitaba a hacer misiones o a siquiera dirigirle la palabra incluso sus compañeros de equipo

Siempre que el se acercaba a ofrecerles hacer una mision estos le decian que dejara de molestar

Incluso ellos hacian misines dejandolo de lado olvidado y Natsu se canso eventualmente de convivir con ellos

Mira me puedes hacer un favor?- le dijo a la peliblanca detras del mostrador

Que se te ofrece?- le pregunto algo cortante ya que estaba ocupada

Podrias firmar esto con tu nombre y el mio estoy practicando caligrafia y quiero tener un ejemplo- le explico a la Strauss

La cual sin darle vueltas al asunto simplemente firmo el papel en blanco
-gracias Mira me puedes traer una rebanada de pizza?- le pidio con una sonrisa de marca registrada

Hai- dijo cansada de tener mas trabajo y fue a la cocina sin ver lo que el pelirosa hacia en la barra

Natsu saco una mision de su bolsillo y agarro el sello oficial de Fairy Tail antes de estamparlo en la mision luego saco un libro de detras de la barra y hizo un hechizo que traspaso las firmas del trozo del papel al registro de misiones

Natsu tenia una leve sonrisa en su rostro antes de guardar el registro y la estampa en su lugar justo a tiempo para que llegara Mira con su pizza

Aqui tienes Natsu- se la entrego y luego se fue a hacer mas de sus pendientes

'Y asi señores es como engañan a una maga clase S en sus narizes'- penso antes de tomar la pizza y largarse a hacer una mision clase S

Aniquilar unos demonios en una cueva que tan dificil podria ser? Ya se habia enfrentado a varios este mes y la verdad le resultaba divertido

Despues de 4 dias a pie de llegar a la cueva que se localizaba en una montaña Natsu se estiro un poco antes de entrar a ella y apenas lo hizo el interior se ilumino con llamas azul

Demostrando la gran cantidad de demonios que infestaba la cueva sacandole una sonrisa a Natsu -estoy encendido!- y se avalanzo contra ellos

Durante 2 dias seguidos Natsu se dedico a nada mas que aniquilar demonios con pasion y para sorpresa de el la cueva no se habia venido abajo con la intencidad de sus ataques

Sobraba decir que la cuave era muy grande pero finalmente estaba llegando al final donde se encontro con...la muerte? Olvidenlo es solo un demonio que se cree la gran cosa

Pero a pesar de eso estaba dando una batalla dura considerando que el DS estaba cansado del largo combate que estuvo sosteniendo por ya casi 3 dias

Finalmente logro derrotarlo y al hacerlo se ilumino una puerta doradada alfrente suyo pero una espada que estaba clavada en el suelo le impedia el paso

Era muy genial a decir verdad el mango parecia un hueso el pomo una corona y la empuñadura parecia un esqueleto con el craneo de un demonio con 2 cuernos sonriente

A Natsu le gusto y decidio quedarsela como un recuerdo de la mision pero apenas la toco sintio una corriente de dolor recorrer su cuerpo entero

Cuando el dolor paro la puerta dorada se abrio dandole paso a Natsu quien ahora tenia una apariencia mas muscular y un mechon blanco

Natsu sabia que mas adelante habian mas demonios joder incluso los podia oler! Pero no estaba en condicion

Natsu cerro la puerta y salio de la cueva prometiendo regresar por ahora lameria sus heridas y disfrutaria su recompenza

Natsu cuando se iba a curar noto que sus heridas poco a poco se cerraban y empezaban a sanar lo cual le agrado

Con una velocidad nueva Natsu salio corriendo entre los arboles en direccion al ciudad que pidio la mision y recibir su recompenza

Oficina del alcalde

Muchas gracias hijo aqui esta tu recompenza- le dijo entregandole un saco con muchos jewels -tambien te ofresco una estadia en un hotel si lo deseas- le ofrecio el alcalde

No gracias eh estado aqui demasiado tiempo pero agradeceria algun medio de..."transporte" para llegar a mi casa- le dijo al borde de vomitar al decirlo

Ven hijo te mostrare algo- le dijo a Natsu antes de pararse y Natsu le siguio a donde fuera que se dirigieran

Natsu SpardaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora