⌠La necesidad de hacer algo con el tiempo restante del diario, hace a KyungSoo conseguir un trabajo de medio tiempo, sin saber que su jefe sea alguien muy extraño. Él guarda secretos detrás de esas puertas con árboles dibujados.⌡
❁ Angst / Drama
❁ M...
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YiFan rescata a KyungSoo luego de veinte minutos en que todos lo estuvieron buscando, había visto el gran hoyo en las escaleras que daban al tercer piso y en el fondo, a KyungSoo recostado sobre el suelo.
El susto había pasado media hora antes, Jessica se encargó de las heridas de KyungSoo, de un poco de alimento y medicinas para el dolor. La mujer no quiso despegarse ni un segundo del universitario con quien sentó al lado de la mesa para comer. YiXing por su parte, se encargó de besar cada herida de su chico, le hizo reír algunas veces y le estuvo molestando con bromas, sólo deseaba que KyungSoo se sintiera mejor. YiFan no dijo mucho, al menos no en la mesa, ya que cuando lo rescató estuvo llorando por algunos minutos antes de sacarlo.
KyungSoo no entiende mucho sobre la actitud del mayor, pero no pregunta y a cambio de eso ofrece una disculpa y da las gracias. YiFan le sonríe mostrando sus encías.
La comida es animada por una charla, pero esta se ve afectada cuando KyungSoo necesita con mucha fuerza respuestas.
— Y... ¿Quién es JongIn, eh?
La sola mención del nombre causa que todos en esa mesa se queden estáticos. KyungSoo cree haber detenido el tiempo, pero no es así, YiXing había parpadeado bastantes veces antes de verlo y jadear. YiFan había tomado la mano del de ojo verde debajo de la mesa para detenerlo, sabía lo que podría llegar a hacer YiXing con esos recuerdos arremolinándose en su interior.
Jessica se apresura a acariciar el hombro de KyungSoo.
— He visto muchas cosas en este lugar, empezando por un álbum de fotos dónde está ese chico bailando, luego los objetos que están en ese lugar en el que me caí. ¿Un bailarín? ¿Por qué no me comentaron de él? Parece ser alguien famoso...
— Bueno –había dicho Jessica mirando a YiXing que le veía suplicante- lo que has visto son cosas personales de las cuales no debiste indagar, Kyunggie. Entendemos tu curiosidad, pero me evitaré incómodas conversaciones con esto pidiéndote que respetes un poco de esa privacidad. Todos aquí nos sentimos muy a gusto contigo y no queremos que cambie ¿cierto?
— Per...
— Por favor, sólo respeta nuestros límites.
— Sí, descuida, yo... sólo tenía un poco de curiosidad, pasa que me gusta mucho el ballet.
Las palabras acabaron junto con esa frase y todo, en media hora después, regresaba a la normalidad.
Juntos jugaron por un rato en la librería. Crearon una dinámica muy extraña de encontrar a autores con homónimos, entreteniéndose por algunas horas de esa forma.
