Alpha Damián

Capítulo 15 (Parte 2)

Resignados, en ese momento todos comenzaron a hablar interrumpiéndose entre sí para continuar con una larguísima historia. Fue Dean que comenzó, hablando del momento que se marchó de este lugar a Canadá. Luego los demás fueron aportando pequeños pedazos de la cosas que pasaron mientras él no se encontraba aquí. Luego el chico que me secuestró continuó hablando de las cosas que sucedieron conmigo -De las cuales jamás habría sospechado como cualquier persona cuerda-, pero todo se podría resumir en dos partes, la primera como ellos llegaron a vivir allí, la segunda como llegamos exactamente en ese campamento y porqué. Instintivamente noté que si lo que ellos vivieron fuese un libro, me hubiera atraído mucho leerlo. Lamentablemente nadie hizo el esfuerzo de intentar decirme cómo es que terminé yo envuelta en todo el rollo.

-- ¿Y porqué es que yo me encuentro aquí? -- Por enésima vez pregunté, y de nuevo obtuve una respuesta evasiva en la que me contaban alguna historia que podía tener cientos de cosas relacionadas, pero definitivamente no tenían nada que ver con un secuestro. Quiero decir, ¿Como relacionar mi presencia con historias de amor? Los cuentos que relataron trataban de parejas formadas por dioses, o por el destino, enfrentando y superando diferentes adversidades juntos. Por un momento pensé incluso que llegarían a hablar de cenicienta o alguna otra princesa de la televisión. No comprendí si eran solo estupideces sus palabras o tenían alguna relación (Seriamente, lo dudaba) Por lo que dejé de intentar conseguir una respuesta más clara y volví a retraerme en mis pensamientos.

¿Si llamaba a la prensa me pagarían por hacer el ridículo contando la historia? Porque si fuese así, podría conseguir el dinero necesario para conseguirme un pasaje de avión a Canadá -Y de paso le diría a mi familia que debemos inscribirnos en algún programa de protección de testigos. La idea me pareció ridícula.

Decidí que estaba completamente trastornada cuando comencé a pensar en como probar o eliminar las posibilidades de los mitos sobre hombres lobos impuestos por la televisión, ¿Apuñalar a alguien con algo de plata? ¿Exponerlos a la luz de la luna? ¿Preguntar si son enemigos mortales de los vampiros -Después de preguntar si es que ellos existen-? La revelación me hizo comenzar a pensar en cada ser mágico o místico del que he escuchado o leído en mi vida. Pero probablemente no todas serían ciertas, ya que en caso de serlas, todo el mundo estaría plagado por seres que la mayoría considera inexistente. Incluso podrían superar en número a los seres humanos normales.

"¿Puedes dar una definición para normal?" Me hubiera preguntado mi maestro de filosofía si pudiera escuchar mis pensamientos. A pesar de ser un hombre mayor, la calma que siempre mostraba me hacía pensar cierto parecido con Dean. 

De pronto mis pensamientos me empujaron a la realidad, el último lugar que quería estar. Alexandra se encontraba hablando con su novio en voz baja, mientas que los dos niños que se encuentran con ellos ignoraban por completo todo lo que sucedía. Desee tener la misma mentalidad con ellos, pudiendo aceptarlo todo sin las cosas que están implantadas en nuestras cabeza por cada figura de autoridad que tenemos. Ser abierto de mente después de cierta edad, es una tarea casi imposible.

Sabía que ellos me ocultaban demasiadas cosas, pero necesitaba saber al menos si vería a mi familia y amigos de nuevo. Ninguno de ellos a primera vista parece ser alguien capaz de raptar a una adolescente y hacerle cruzar la mitad del mundo. Alex tiene la apariencia de una linda chica tímida con sus ojos azules, su novio parecía ser protector y tal vez autoritario, los niños eran como cualquier otro. Los padres de Damián y Dean actuaban como matrimonios felices y completos. Tyler me parecía misterioso, cuando estaba alrededor de Dean era muy callado, hablando a penas lo necesario. Y Dean... no fui capaz de asociarle una sola característica ya que de todo el grupo, a quien más había logrado conocer era a él.

Me concentré en la comida. El lugar parecía un colegio,  con niños de diferentes edades mezclados. Aunque la comida era mucho mejor que la de un colegio. Los niños y jóvenes parloteaban en voz baja, aunque me dio la impresión de que generalmente no era de esa forma. Los más grandes daban miradas fugaces a esta mesa, y cuando alguien los pillaba mirando apartaban la mirada rápidamente retomando sus conversaciones. Durante todo el desayuno nadie dijo algún comentario de interés. Me alegré de que fuese así.

Cuando los platos de nuestra mesa se encontraban vacíos casi por completos una chica de unos 15 años se acercó a nuestra mesa dando pequeños saltitos e interrumpiendo las silenciosas conversaciones privadas que todo el mundo había estado teniendo -Sin mi, claro- La mona chica con una sonrisa radiante habló de inmediato. 

-- Espero que tuvieran una buena noche y que les gustara el desayuno -- La muchacha estaba hablando principalmente a Alexandra, con quien supuse que se sentiría más cómoda -- Pero me han pedido que todos ustedes estén en quince minutos máximo  en donde nuestros mayores se reúnen. Todo lo que pidieron está listo y ahora es su turno. Si quieren ir ahora mismo, los acompaño. Y de paso me filtro dentro de la reunión.

-- Vale, de cualquier manera ya terminamos de desayunar -- Todos en la mesa se levantaron. Yo lo hice un poco más tarde después de salir de un estado de confusión. Ellos parecían estar extremádamente sincronizados, como una gran familia. Aunque había notado que entre ellos muchos no tenían un grado de confianza tan alto como con otros. Y sentía que algunos a penas se soportaban ver las caras. Dean fue quien continuó hablando.

-- ¿Quién se quedará cuidando a Liv? -- Habló como si yo no me encontrase de pie a unos pasos de él. No necesitaba que nadie me cuidara, porque estaba decidida de que si ellos no planeaban regresarme a mi hogar, no me quedaría a un lado con más secretos acumulándose alrededor.

-- Nadie la cuidará. No pienso perderme nada de ahora en adelante -- Principalmente hasta que descubriera la razón por la que me encuentro aquí, para decirle a la policía un informe completo en su momento, pero no agregué eso en voz alta. Me puse un disfraz y comencé a personificar a alguien que no me representaba. Una chica fuerte y valiente, capaz de enfrentar cualquier cosa. La verdadera Olivia estaba deseando que su personalidad se hiciera así, pero no estaba segura. Al menos sabía que antes de llegar al comedor alguien había llevado unos kilos de comida para su mascota y si algo le pasaba, él no tendría hambre. 

Ellos intercambiaron una mirada pero no dijeron nada.

Entonces todos comenzamos a caminar hacia la zona central, donde todo había sido decorado como si un concierto al aire libre -Con pocos fondos- fuese a desarrollarse allí. Aunque por las miradas del resto de personas supuse que no se trataría de un evento musical. Pude ver por primera vez como el lugar estaba organizado. Parecía un pequeño pueblo -Muy, muy pequeño- Con casas del mismo portes decoradas de distintas formas. Algunos lugares que tendrían una función distinta eran grandes y estaban especialmente bien cuidados, como es el caso del enorme salón en el cual la chica que nos fue a buscar nos escoltó en su interior. Ella había estado hablando con todos a excepción de mi, mi expresión no debía ser especialmente amistosa y no puse atención a ninguna de sus palabras. Me encontré demasiado concentrada en mirar a mi alrededor. La noche anterior, cuando me había filtrado fuera de la habitación en la que debía dormir no había admirado el lugar como lo que ahora podía ver. Había tenido demasiado miedo como para verlo como un lugar lindo.

Volví a la realidad cuando una puerta frente a nosotros fue abierta revelando en su interior a decenas de personas sentadas en sillas puestas en lugares muy poco organizados. Los ocupantes no eran exactamente adultos. Muchos de ellos podían ser incluso menores que yo, aunque sus ojos expresaban una madurez diferente. Había una hilera de sillas vacías en las que se nos invitó a sentarnos, solo tres de ellos permanecieron de pie rondando como silenciosos fantasmas alrededor: Damián, Tyler y Dean.

-- Muy bien, tenemos varias cosas de las cuales hablar.

Dios, en serio lo siento por el enorme atraso. En actualizar. Para compensarles intentaré traer otra parte de la historia el día de hoy, aunque sea más breve que un capítulo. 

Bueno, el día de ayer estuve con muchos cólicos por lo que no escribí nada. Además hubo muda de habitaciones en mi casa y por fin tengo una propia B) Lamentablemente con el dolor de útero (Bien, ya saben que estoy con Andrés) Tuve que mover un montón de cosas de habitación antes de poder ir a dormir.

Espero que el capítulo haya sido de su agrado. No se olviden de comentar y votar :3

¿Quieren que en algún capítulo integre preguntas a los personajes o a mi? Estaré esperando sus opiniones sobre esto.

Los ama...

-Valerie.