Borrón y cuenta nueva.

35 2 3
                                    

Si te soy sincero, no se, como se llega a este punto pero siempre aterrizo sin ser avisado, como sin ni siquiera conocerte, ya saber sin saberlo que serias alguien importante, y resulta que aquí acabo, escribiendo a las dos de la mañana por traicionarme a mi mismo. Y la realidad es que hace poco más de un mes, honestamente no sabía más que tu nombre, pero es verdad que muchas veces no elegimos nuestra vida, es la vida quien nos elige a nosotros, y de esta forma, discretamente, sin darnos cuenta, esta nos llevo a hablar aquí, y a coincidir allí, y sin saber lo que yo sentía y sin saber lo que tu sientes, aún sigo sin saberlo; charlamos sin complejos, dos casi desconocidos, como amigos de siempre, y por lo extraño del universo casi llegamos a pasar tres días enteros juntos.

Pero de alguna forma creo que el tiempo se nos acaba a los dos y cada día que no te veo se pierde un poco, y a este ritmo puede que llene la papelera, y a estas alturas solo sé lo que quiero, y es poder contarte esto sin miedo, para eso solo necesito un "sí", y no me lo das, porque soy un ingenuo, ya lo sé, por no haber preguntado antes, ahora siento que puede ser demasiado tarde.

No es porque no hubiese podido contar esto antes, pero cuando pude, no lo sabía y ahora que no consigo la oportunidad me doy cuenta, tal vez es como esa frase de que cuando te quitan algo descubres cuanto lo quieres, lo necesitas.

A pesar de todo esto yo seguiré intentando y esperando, con la esperanza de cruzarme contigo en cualquier parte como aquella vez y acabar en cualquier otra. Sigo soñando, que nos daremos la mano, con una sonrisa, y llevaremos la feliz duda de no saber donde vamos a despertar mañana.

Solo esperó acabar irónicamente otra vez, bajo la luna, toda la noche con mi inesperada playlist de fondo y seguir charlando siempre como si no fuera a amanecer nunca, y poder mirar tus ojos bañados en el brillo de la luna, y esta vez sí decirte que no había visto antes nada así. Revivir todo eso que vivimos, y repetirlo cada día, de una forma totalmente diferente a la anterior como algo completamente nuevo, porque lo es, y como suelo decir no importa ni dónde, ni cuándo, ni cómo, sino con quién.

Y subir a tu casa y emborracharnos el uno del otro, como tantas veces antes, y seguir sin la necesidad de decir nada porque confiamos completamente en el otro, y convertir cualquier conversación o cualquier silencio en algo mágico, en una experiencia religiosa, porque tú eres magia y hacemos entre los dos con nuestras miradas el secreto truco de vivir, diciéndolo o sin decirlo, pero con amor.

No te pido más que eso, que poder acompañarte, a donde sea y con quién sea.

Rock, Pollock y CointreauWhere stories live. Discover now