Cartografía de Prisma

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Bienvenido sea el lector al mundo de Prisma. Sepa que el reino en el que está a punto de aterrizar no es fruto de la imaginación de este servidor ni tampoco una compilación de viejos mitos inteligentemente hilvanados para ganar personalidad propia. Prisma no fue creado, fue descubierto. Lo encontré en la inmensidad del cosmos, vagando errante en la gran oscuridad, un mundo de tres lunas, grandes y profundos océanos, escarpadas montañas, recónditos valles, vastos desiertos... Un mundo, ante todo, lleno de vida.

Pudiera parecer que mi trabajo cartográfico es más bien pobre, y que probablemente esté incompleto. No lo negaré. Aún me falta mucho Prisma por conocer, muchos bosques que visitar, muchas laderas que escalar y muchos mares en los que darme un chapuzón. Aún tengo que conocer a muchas de sus amables o no tan amables gentes, demasiadas criaturas de las que aprender o con las que maravillarme, muchas nubes y estrellas en el firmamento que escrutar y adivinar. Pero si algo sé, es que mi obra es el sincero resultado de mi pulso decidido a dignificar este mundo al que ya puedo llamar hogar.

¡Cuán distinta sería la Tierra si pudiesen sus dignos habitantes abrir una ventana a Prisma y ver y aprender cuanto yo he visto y aprendido!

Y sin embargo, la supervivencia de mi amado mundo corre por el filo de la navaja. Rápido, lector anónimo, déjame hacerte partícipe de todo cuanto aflige a Prisma, quizás puedas aprender algo de la traición, de la ambición, de la codicia, del hedonismo y de la venganza.

Rápido, lector. Ya vienen...

 Ya vienen

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PRISMA: La Corona de los InfielesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora