KINGS. (The Vamps)

14. Curate tu sola.

Tres días, ya pasaron tres putos días desde que Bradley esta enfadado. Me daría igual si sólo fuera el pero, todo Cambridge actúa como si yo fuera la peor de las villanas.
Murmuran cosas y groserías hacia mi, me esconden mi butaca y abren mi casillero.
Eso me hace recordar cuando llegue a Cambridge.

Lo bueno es que no eh faltado al trabajo. Aplausos para mi.
Kari dijo que ella y Tristan vendrían a verme para investigar un poco más sobre Nash y su extraña desaparición después de revelar las fotos.

~Narra Brad~

Dejaron una nota en mi auto, resulta que una chica quiere verme en un hotel que esta en el centro de Londres. Obviamente no iba a rebajarme a su nivel vulgar pero, dijo que tenía información importante.

Me encontraba frente al hotel, aún no decidía si entrar o no. Y si tenía más fotos de Hazel? Eso en verdad me lastimaria mucho y no podría soportarlo más.
En el momento que vi las fotos en la cafetería, ese movimiento especial en mi estómago de cuando veo a Hazel, desapareció.
Sea lo que sea me tengo que enterar, no puedo con los nervios pero aún así lo haré.

Abrí la puerta principal del hotel y comencé a caminar con rumbo a las habitaciones.
La nota decía que era la habitación 69, apenas estaba llegando.
Cuando al fin llege frente a la puerta, gire la perilla y esta estaba abierta.

Era la habitación, la habitación donde Hazel y ese tipo se acostaron. La cama estaba llena de fotos de Hazel y el tipo. Exactamente esto era lo que no quería ver.

"Lo siento mucho, Brad." Dijeron a mis espaldas, di la vuelta y me encontré con una chica rubia.

"Tu, tu eres amiga de Laurie y estas en el salón de Hazel."

"Shh, no hables, amor." Puso su dedo en mi boca y di un paso hacia atras.
"Deja de pensar en esa zorra, porque no piensas en mi? Mira todo lo que hice por ti, sólo para tenerte junto a mi." Su mirada era extraña.

"Callate, no hables así de ella."

"Al pobre Brad siempre le rompen el corazón, primero Karina y ahora Hazel."

"Tu hiciste esto?"

"Qué, las fotos? Claro que yo lo hice, no encontraba nada en contra de Hazel y que mejor que hacerla pasar por una zorra, pero ahora ya estas conmigo, amor, ya todo esta bien."se acerco a mi y me abrazo.

"Sueltame, vas a pagar lo que hiciste, la zorra eres tu!"

~*~

"Cuentales todo." Le ordene.

La rubia se puso frente a Tristan, Kari y Connor. No habíamos ido al instituto, yo debía arreglar el problema que esta idiota hizo.

"Todo empezó cuando yo tenía 6 años, había entrado a Cambridge y para mi era aterrador. Tu eras tratado como un rey al igual que tus amigos, nadie se acercaba a ti. Un día estábamos en el patio, yo estaba dibujando algo sobre ti. James tocaba s guitarra, Connor hacía garabatos en su cuaderno, Tristan jugaba con tu cabello. Notaste que te miraba mucho así que te levantaste, miraste mi dibujo y lo tiraste al suelo." Limpio una lágrima de su rostro y siguió hablando.
"Me dijiste monstruo, dijiste que era horrible y que las niñas como yo no servimos para nada."

"Sinceramente no sé como recuerdas eso." Dije y tome un poco de agua.

"Lo recuerdo porque me lastimo mucho, después de ese día le dije a mi mamá que no quería regresar al colegio, nos mudamos a New York y me hicieron cirugías en el rostro. Mirame ahora Bradley, soy hermosa verdad? Aún mas hermosa que Hazel, porque no me amas?"

"Lo siento mucho, y la verdad no por mi. Yo no me arrepiento de nada de lo que he hecho en mi vida. Lo siento por ti porque antes quizá eras linda e inocente, ahora sólo eres una vacía cabeza rubia. Y no me gustan las rubias."

Ya las escuche a todas diciendome que soy un malote y todo eso pero, la chica en verdad esta loca.

Si todas las chicas de Cambridge se cambiaran lo que no me gusta de ellas entonces, a quien molestaría.

~Narra Hazel~

Al fin había salido de Cambridge, monte mi bicicleta y ansiosa por llegar a casa, arranque.
Sabía que no debía andar tan rápido pero estar en Cambridge y ser enemiga a muerte de Bradley es horrible.

De pronto, todo se vuelve obscuro, mis rodillas arden y puedo sentir la sangre que sale de mis codos.
Ya en el piso, miro a todos lados buscando la razón por la que me caí, sólo logre ver a dos de mis compañeros con una cadena en las manos, ellos lograron tirarme de la bicicleta.
Un gran círculo de estudiantes se formo a mi alrededor, comenzaron a tirarle gasolina a mi bicicleta y procedieron a prenderla en llamas.

Tirada en el piso y sin poder levantarme gracias a los golpes, sólo miro a mi alrededor. Quien iba a salvarme ahora? James no estaba ahí para mi, para brindarme una mano como siempre lo hacía.

El círculo de personas se abrió gracias a los empujones de alguien, Bradley comenzó a lanzar a todos y a golpear a algunos chicos. Se acerco a mi y me levanto, me cargo en sus brazos y no le importo que este se manchara de sangre.

~*~

Un dolor punzante en mi rodilla izquierda hizo que me levantara de golpe. Abrí los ojos y note que estaba en una habitación enorme y elegante.

"Perdón, no quería lastimarte!" Dice Bradley alejando una gasa mojada con la que limpiaba mi rodilla.

"Siempre consigues traerme a tu casa." Dije y sonreí.

"Pues perdón, te hubiera dejado tirada..." Lo interrumpo.

"Gracias... eso quiere decir que me perdonas? Por no haber hacho nada malo, claro esta."

"Perdóname tu a mi, no quise escucharte."

Por alguna razón no podía dejar de ver sus labios, el lo noto así que también empezó a ver los míos. Y se hizo el silencio, va a besarme? Quizá debería corresponder el beso, el me salvo.

"Bueno, curate tu sola!" Bradley acabo con el lindo momento que pudo llegar a pasar, me lanzó la gasa a la cara y salió del cuarto.