Tu horrible pasado, las constantes pesadillas no son suficiente para que una niña amorosa, divertida, soñadora cambie a una chica ruda, inexpresiva? Pues yo creo que si.
Hubo esa etapa en la que era una niña llena de vida, realmente era feliz con mi...
Mi hermana es imposible, ni si quiera podía mantener una conversación tranquila con ella porque era grosera o simplemente se iba.
- ¿Me vas a decir quién era ese tipo que salió de mi casa? - ni si quiera regresó a verme.
Se sirvió la comida y se sentó junto a Cara sin responderme o mirarme.
-Blade ¿Que hacia aquí?
-No te importa- comencé a molestarme y Cara lo noto, acaricio mi rodilla para que me tranquilizara y de esa forma no volviera a preguntar nada.
- ¿Iremos a la fiesta de Britany? - Kyle cambio el tema preguntando por la fiesta de la capitana de las animadoras.
-¿Qué no era obvio? Debemos aprovechar- Cameron se mordió el labio como sabían hacer las chicas cuando le coqueteaba y eso nos hizo reír.
-Voy a quedarme aquí, vendrá Jess- Cara se encogió de hombros restándole importancia según ella.
-Linda puedes llevarla con nosotros- tomé su mano mientras miraba a Blade tratando de ver si tenía algún interés, pero nada.
-Va a venir solo por un rato y después se ira- hizo un intento de mueca.
- ¿Vas con nosotros Nath?
-Solo si Cara me deja- Kyle miro a Cara con burla sabiendo que asi ella diría que sí.
-Blade ¿vienes? - estaba seguro que Cameron no se rendiría tan fácil con ella así que iba a seguir hablándole.
-Claro que no, me imagino que van a la fiesta de alguna de las barbies mal hechas y si no estoy mal una de las putas que se tiran- Cara se tapó la boca para no reír.
-Está bien- dijo despacio Cameron como si tuviera miedo de que pudiera decir algo más. Ella se levantó, dejo el plato en el lavadero y se fue.
- ¿Qué es lo que le pasa a tu hermana? - pregunto Kyle con un poco de fastidio.
-Ella es así Kyle- suspire.
Blade
Era la primera vez en mucho tiempo que dormía temprano y es que en cuanto Nathan se fue lo mejor que pude hacer fue encerrarme y olvidarme del resto del mundo. Por la mañana hice lo habitual para poder bajar a desayunar y luego al Instituto. No recuerdo si tenía deberes, pero si era así no los hice y no pienso hacerlos durante la clase, una lástima.
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Tomé mi maleta, mi billetera y mi celular, bajé a la cocina prácticamente a hurtadillas para no encontrarme a nadie. Cogí una manzana y un poco de jugo, por poco me atraganto escuchando pasos en el piso de arriba así que salí corriendo.
Para mi buena suerte no había deberes que entregar así que me relajé por siguientes horas de clase antes del receso y cuando llegó la hora lo único que deseaba era fumar así que a diferencia de otros fui hacia el patio y no al comedor.
