Capitulo 1: Nuevo año, nueva vida.

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Eran principios de Enero y ya tuve que comenzar con mi trabajo, uno digno sinceramente a pesar de que sea para mis padres, si, lo hago para ellos. Aunque trabaje para mi propia familia, me gusta porque así gano dinero por mis propios méritos, pero no faltan las personas que hablen de mi dándome la fachada de niña mimada llena con lujos y ropa de marca, detesto eso, son solo objetos que no me llenan para nada el corazón, aquellos son dueños de tan famosa empresa de internet "Linked", en donde mi padre es el dueño y mi madre la encargada de negociar con otras páginas de otros lugares, para así ganar más dominios, mientras que yo tengo el puesto de diseñadora gráfica ya que en eso consiste la carrera que llevo desde que salí de la Universidad. Definitivamente esto es lo mio, he hecho más de trescientas imágenes para publicidad y además recrear cada tres días la pagina oficial, dar buen rostro a la empresa, diseñar todo tipo de variedades tecnológicos, entre otras más.

Ya eran las seis de la tarde y mi hermana aún no llega de la Universidad, llevo una hora y media esperando a que aparezca en casa y ni rastro de ella, ningún mensaje o llamada de su parte. Irresponsable, después se esta quejando el porqué mis padres la han despedido de su puesto, llegar temprano no es digno de ella. Voy directo hacia el sofá y me siento a mirar tv mientras llega, pasan 10 minutos y ya la veo de frente sonriendome mientras que sus manos están llenas de bolsas.

-¿Que sucede contigo Jany? Llevo esperándote horas y tu solo apareces cuando se te da la gana- le reprocho mientras la sigo con la mirada, esta se lanza al sofá a mi lado y me abraza.

-Lo siento Juli, es solo que cuando venia a casa me topé con esa hermosa boutique y no me pude resistir- me dijo haciendo un puchero escondiendo su cara en el hueco de mi cuello. Siempre hace esto, de seguro solo compró vestidos para ella nada más, ruedo los ojos y la obligó a soltarse de mi.

-Jane sabes que debes ser puntual y no estar solo gastando dinero en ropa, recuerda que en unos minutos vendrán nuestros padres y ni siquiera estas lista-  le dije levantándome yendo hacia las escaleras.

-Oh vamos hermanita, no te enojes y mejor prestame atención, mira- levanta la bolsa azul rey con el logo tipo de "The Closser" en su exterior, saca un vestido color plateado brillante y me lo lanza, lo atrapo y lo veo con una mueca- hoy en la noche habrá una fiesta en casa de Luke, y pues como hace mucho no salimos a divertirnos juntas, quisiera que dejaras por favor ese estúpido trabajo tuyo y te la pasaras bien conmigo- su rostro me pedía clemencia, tiene razón, desde que comencé a trabajar para la empresa no salgo de casa sino solo para ir y venir de la empresa.

-¿Estaría bien? no lo sé, es que tengo mucho trabajo y.. -no termino de hablar cuando me corta ella.

- Deberías salir un poco Julieth, tanto trabajo te hará añicos el cerebro, mirate, eres hermosa y estando con los ojos en la laptop no te hará una familia, ni hijos, ni un marido que te quiera, deberías aprovechar pero no lo haces, así que si tu no quieres salir pues yo misma te arrastraré a jalonazos fuera de casa- dijo mientras ponía su mano en su cadera y me daba un reproche estúpido pero tan realista.

-Demonios, tienes razón, lo siento tonta- le dije mientras iba hacia ella y abrazaba con fuerza, -lo sé, me amas, lo sé,- me susurró con superioridad, pellizque su brazo y chilló.
-El amor duele hermanita querida - solté riendo y salí corriendo hacia mi habitación. Debo estar lista para la cena que llevo días planeando, ahora solo falta que lleguen.

Apenas entré a la habitación, cerré la puerta y me paré frente al espejo enorme que había en la pared, observé el vestido en mis manos y lo solté, lo señi a mi cuerpo y simplemente se veía espectacular, tenia pequeñas piedras en la parte frontal de la cintura que brillaban, en la parte de arriba era en forma corazón largo, haciendo dos pliegues hasta por debajo de los pechos, en la parte de atrás tenia una abertura con una suave seda color piel cubriéndolo en lo más mínimo, claro eso cubriría mi espalda, si aja- pensé ridículamente, era muy corto, apenas me llegaba a la rodilla, de cosa cubría mis muslos pero he de admitir que me vería sexy con él. Dejé de imaginar tonterías y decidí guardarlo en el ropero, debía estar preparada para la reunión de hoy con mis padres, ellos me la deben, cada vez que está todo planificado y realizado, deciden cancelar por problemas de la empresa, no tienen tiempo para nosotras que somos sus hijas. Es injusto que nunca nos den un buenos días o linda tarde, ni siquiera nos dicen algún te quiero o algo por el estilo, me duele y se que a Jane también, pero ninguna de las dos nos atrevemos a decirlo o hablar sobre el tema, siempre hemos sido ella y yo, juntas en todo a pesar de las peleas tan inmaduras que tengamos, somos hermanas y siempre nos apoyamos por muy loco que sea el asunto que se presente. Pero lastimosamente necesitamos de ellos, los queremos aunque ellos no nos den ni un poco de afecto. Cogí mi toalla y enseguida fui al baño, tenia poco tiempo para ducharme así que hoy pasaría de el masaje capilar, sinceramente ya me había duchado pero soy una maniática a la buena higiene. Después de haber hecho todo allí, me sequé y corrí a vestirme con unos jeans negros ajustados y una camiseta de mangas a codo azul turquí, recién planchada, desenredé mi cabello y lo recogí en un moño dejando mi fleco fino en la frente, solo un poco de rubor y brillo. Perfecto.

Me acomodé en la cama y me dispuse a poner mis vans negras rápidamente, cogí mi celular y marqué a mi padre, le dejé dicho con la secretaria que ya estaba todo arreglado y que fuese puntual. Fui directamente a la habitación de Jane y toqué, la puerta se abrió con una chica parecida a mi con una sonrisa de labios y cabello caído hacia atrás, se veía hermosa pero sus ojos demostraban melancolía, pasé y abracé enseguida, se que no esta bien.
-Tranquila Jany, ellos vendrán- dije arrastrando las palabras mientras la llevaba hacia la cama para sentarnos y estar más cómodas.

-No te creo Juli, pero de todas formas gracias por decirlo- susurró entrecortada.

Agarré su mano y la obligué a bajar conmigo a la primera planta, nos sentamos en la mesa del comedor, ella de lado izquierdo y yo del derecho en frente, había puesto un hermoso mantel blanco con orquídeas de adorno, se esparcían por todo él mantel con sus largos pétalos de color arcoiris pálido, en él centro se encajaba un plato de frutas con pequeñas letras japonesas en su alrededor, venían dos mujeres bien vestidas de uniforme sirviendo uno que otro plato de vidrio en cada rincón de la mesa, en segundos él ambiente estaba cargado de aromas ricos, olía a hogar.

El timbre sonó y por fin solté el aire que tenia retenido en mis pulmones, estaba nerviosa, me levanté tambaleante y me dirigí a la puerta de entrada, la abrí y en vez de encontrar a mis padres, solo estaba un hombre de chaleco y corbata escribiendo en una libreta.

-Disculpe, ¿es usted la señorita Julieth Montestruque? - preguntó sereno.

-Por supuesto, y usted es..? - no terminé de hablar cuando ya había tomado la palabra por mi, atrevido.

-Vengo a avisarles el terrible suceso que ocurrió, sus padres han tenido un accidente, lastimosamente fue tan grave que no sobrevivieron...-

¿Que?

-¿Que? No no, esto no puede ser posible, esta seguro usted que? - no tenia palabras, esto no podía estar sucediendo, no puede pasar, debe ser una broma. Cerré la puerta en su cara y me dirigí con paso recto hasta el comedor, allí estaba Jane, mirándome, en su mirada brotaba preocupación, por mi. No se que hacer, no se que decir, no se que pensar ahora, esto no esta pasando, debe ser una pesadilla.

-Juli, ¿que sucede? - pregunta nerviosa.

-Nada, es solo que..- mis piernas tiemblan, mi boca se seca y de repente siento que me falta el aire, empiezo a sudar horriblemente y corro a lo que puedo por agua, no alcanzo a llegar y tropiezo con mis pies cayendo de cara al duro mármol.

-Julieth! - gritó, pero no escuchaba tan fuerte como suponía, la oía lejos, muy lejos, sentí unas manos sacudirme pero luego todo se tornó oscuro y negro.

William & JuliethDonde viven las historias. Descúbrelo ahora