"Doce rosas"

Capítulo 17: "Juego de amor"

(Últimos capítulos)

Dos jovencitos platicaban juntos a la salida de la universidad:

¿Y ahora que lo sabes qué piensas hacer?, dijo Krilin.

Le seguiré el juego hasta que ella me confiese sus sentimientos, dijo el joven de cabello alborotado.

¿Pero y después?, dijo Krilin.

Krilin yo siempre he sentido un cariño especial por Milk, sabes estuve pensando y creo que todo este tiempo estuve suprimiendo mis sentimientos hacia ella ya que trataba de verla como una hermana, pero ella no es eso mío y ahora que lo sé pienso luchar por su amor y si ella quiere jugar con mi para descubrirla pues le seguiré su juego de amor a ver quién de los dos cede primero, dijo Gokú con firmeza.

Me parece perfecto amigo y no te preocupes no le diré nada a Dieciocho, dijo el calvo. Mira Gokú allí viene tu "hermanita", dijo el calvo sonriendo viendo en dirección de la mencionada.

Hola Krilin dijo Milk saludando al calvo.

Hola Milk, bueno los dejo, dijo el calvo con una sonrisa.

Vámonos muñequita, dijo el joven de cabello alborotado abriendo la puerta de su auto para que la pelinegra subiera.

Dos semanas pasaron desde que Gokú descubrió que Milk era la chica de las rosas, pero todo ese tiempo él había seguido insistiéndole en que le ayude a encontrarla, mientras Milk solo le decía que aún no la lograba encontrar. Ya quedaba un solo día para el cumpleaños de la pelinegra, que por casualidad caía día domingo, todos en su casa se encontraban organizándose para ese gran día ya que la jovencita cumpliría 18 años.

Entonces así quedamos, dijo Gine.

Así quedamos dijeron todos los Son y el padre de Milk.

Al día siguiente:

¡Felicidades¡ mi niña, decía su padre mientras entraba a su dormitorio con una enorme caja de regalo.

¡Gracias papito¡, dijo la joven pelinegra abrazando a su padre.

¡Feliz cumpleaños¡ mi niña hermosa dijo Gine, entregándole un nuevo regalo.

Gracias tía, dijo la pelinegra recibiendo el obsequio.

Bardock y Raditz también se acercaron a abrazarla, mientras el joven de cabello alborotado miraba desde la puerta de la habitación como la bella jovencita recibía sus obsequios.

Luego de que sus familiares salieron de la habitación el atractivo jovencito se acerco a la cama donde se encontraba la pelinegra abriendo sus regalos.

¿Cuál te gusta más?, escucho la pelinegra y levanto su rostro para encontrarse con la mirada de su amado.

Todos están muy lindos, dijo la jovencita que empezaba a ponerse nerviosa por la cercanía del joven que amaba.

¡Feliz cumpleaños princesa¡ dijo el joven abrazando a la joven contra su pecho, mi regalo te lo daré por la tarde, dijo el joven muy cerca de su oído.

No tienes que molestarte, dijo la joven al separarse de él. 

No es ninguna molestia, además yo también me divertiré mucho, dijo Gokú sonriendo, dejando intrigada a la bella pelinegra.

Luego de un buen desayuno familiar, Gine con la ayuda de la cumplementada estaban organizando el almuerzo familiar, cuando en eso el timbre de su casa sonó.

Ring ring ring

Gracias escucho, decir la pelinegra a Raditz. Luego vio ingresar al joven con un enorme oso de peluche que decía gracias por ser parte de nuestra familia.

De todos nosotros para ti pequeña, dijo el joven abrazando a la pelinegra.

La cena transcurrió entre amenas conversaciones y risas entre todos los integrantes de la familia.

1 hora después:

Nos vamos dijo el joven de cabello alborotado tomando la mano de la pelinegra para salir juntos de su casa.

¿A dónde vamos?, pregunto la pelinegra.

Por tu regalo, dijo Gokú sonriendo mientras arrancaba el auto.

Gokú llevo a Milk, primero a una lujosa tienda de la ciudad, y le dijo que eligiera lo que más le guste, la jovencita eligió una hermosa cartera, luego ambos fueron a tomar un helado a una famosa Heladería de la ciudad.

¡Gracias Gokú¡, dijo la bella pelinegra.

No me agradezcas porque este no es aún tu regalo, dijo el joven sonriendo.

¿Cómo qué no es mi regalo?, ¿y el bolso?, dijo la bella jovencita.

Bueno es parte del regalo, pero aún falta uno, solo que tenemos que esperar un poquito e ir al mirador, dijo el joven mirándola directamente a los ojos a la jovencita haciéndola sonrojar.

¿Al mirador?, dijo la pelinegra.

Si allí te daré tu último regalo, dijo Gokú.

Casa Son:

¿Cómo creen que les este yendo?, decía preocupada Gine.

Espero que bien, lo que no entiendo ¿porqué Gokú de un momento a otro parece más interesado en ella será que ya se dio cuenta de sus sentimientos?, decía el abuelo.

Tal vez padre, eso explica su comportamiento, dijo Bardock.

Pero si era obvio que ellos dos se gustan solo que mi hermanito todo este tiempo no ha querido aceptarlo dijo Raditz.

¿Y lo que le paso con esa chica Bulma?, dijo Gine.

Ella solo fue un amor pasajero, una ilusión, se dejo deslumbrar por su apariencia, en cambio Milk lo conquisto con la pureza de su corazón desde el principio solo que él no ha querido darse cuenta dijo Raditz.

Si mi niña no solo es bella por fuera, sino tiene un corazón de oro, decía el orgulloso padre.

Con Gokú y Milk:

Ya estamos aquí ahora a subir, decía el joven de cabello alborotado tomando la mano de la pelinegra, quien al sentir el contacto de su mano con del joven que amaba sintió una gran emoción.

Ambos jóvenes llegaron a lo alto del mirador, Gokú miraba su reloj, como esperando que algo sucediera.

¿Ya es muy tarde, verdad?, mejor volvamos decía con tristeza la joven al saber que su sueño terminaba.

No aún no, dijo el joven apretando más su mano entre la suya para no soltarla, miraba arriba dijo el joven dejando impactada a la jovencita.

La jovencita no supo en qué momento sucedió solo pudo ver en el cielo que con el humo de una avioneta se formaba un mensaje:

¡Feliz cumpleaños mi querida Milk¡

La joven sollozo de alegría y se abrazo al joven de cabello alborotado, dándole las gracias por tan bello detalle.

¡Gracias Gokú¡, este ha sido mi mejor cumpleaños, dijo la jovencita mientras el joven la abrazaba a su pecho y le daba un tierno beso en la cabeza.

¡Me gustas Milk¡, pero aún no es el momento de decírtelo, pensaba el jovencito de cabello alborotado.