''Mi Nombre Es _________ Y Vivo En New York City. En Un Viaje Familiar A Londres, Mi Vida Cambió Cuando Una Sombra Me Secuestró En La Noche Y Me Llevó A Otro Mundo... NEVERLAND''
Esta Historia Es Un Fan Fiction Sobre La Serie ''Once Upon A Time'' Do...
- Bueno, Felix me dijo que nos encontrábamos en Neverland, así que creo que es bastante obvio que el jefe es Peter Pan - Dije regresando mi mirada a sus ojos.- Perdón, sigo sin saber tu nombre...
- Oh, ¿acaso olvide presentarme? -Dijo con cara de sorprendido- Mi nombre es Peter, Peter Pan.
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Me quedé paralizada ante tal revelación. El definitivamente no se parecía al Peter Pan que encontrabas en los cuentos, o en Disney... Bueno, por lo menos no completamente.
Peter debió haber notado mi estado de shock, por lo cual trato de seguir con la conversación.
- Y.... ¿Qué te trae a Neverland, ___________?
UNA SOMBRA QUE AL PARECER DISFRUTA SECUESTRAR GENTE .- Pensé, ¿Enserio me estaba preguntando esto?
- Pues... Estaba en mi balcón leyendo, cuando de pronto, una sombra tomó mi mano y me arrastró hasta este lugar. ¿Qué no esa es la única manera de llegar aquí?
- ¿Por que dices eso? ¿Cómo puedes estar tan segura?- Preguntó extrañado.
- Verás... - Dije tratando de encontrar las palabras correctas para explicarle - de dónde yo vengo, hay muchos libros que hablan sobre ti y sobre este maravilloso lugar, y en esos libros dicen que la única manera de llegar aquí, es sí tu sombra va hasta tu alcoba y te trae. He soñado con venir aquí varias veces, desde niña. De hecho, aún estoy sorprendida de que en verdad este aquí.
- ¿Enserio? -Dijo Peter esbozando una sonrisa ladeada- Pues déjame decirte ___________, esos ''libros'' de los cuales hablas, al parecer no cuentan toda la verdad...
- ¡Ya lo creo! Los niños perdidos no son tan gentiles como en los libros, ni tan... niños.
- ¿Cómo? ¿Acaso te han hecho algo?
¿¡ADEMÁS DE METERME EN UNA JAULA A LA FUERZA Y MANTENERME COMO PRISIONERA POR HORAS!? -Pensé
- Peter, me acabas de liberar de UNA JAULA. ¿Tú qué crees?
- ¡Cierto! Ven, vamos hacia el campamento -Dijo mientras tomaba mi mano de nuevo, y se dirigía de regreso al campamento.
- ¡Espera! -Dije algo nerviosa- ¿Qué pasa si me vuelven a encerrar?
- No dejaré que eso pase ______, de hecho debo hablar con ellos, lo que te hicieron no es correcto.
Oh, ¿enserio? yo pensé que era totalmente normal el hecho de que te aprisionaran. - Pensé, hago muy buen trabajo controlando mis pensamientos sarcásticos.
Cuando llegamos al campamento, los niños perdidos dejaron de bailar y sus miradas se centraban en Peter y en mi. Parecían -además de sorprendidos- asustados, y no podía entender porqué. La asustada debería ser yo...
- P-pan... -tartamudeó nervioso uno de los chicos- no sabíamos que había escapado, enseguida la encerramos...
Los chicos, aún con una mirada qué expresaba algo de nervios y... ¿miedo? Empezaron a acercarse a mí con intenciones de encerrarme de nuevo.
- BASTA. - Dijo Peter levantando la voz con un tono amenazante, haciendo que los chicos pararan rápidamente, aún más asustados de lo que se veían antes.- ¿Qué manera es esta de tratar a nuestra invitada? Eso no es correcto.
Todos los chicos se volteaban a ver entre sí, con confusión expresada en sus rostros...
¿Porqué actuaban de esa manera? Será que Peter... No, Imposible.
- De ahora en adelante, trataran bien a ___________, si me llego a enterar de que alguien le hizo algo... -Peter se detuvo, cómo pensando en sus palabras, después sonrió y agregó- sólo sean amables con ella, ¿de acuerdo chicos?
Los chicos aún confundidos, accedieron y empezaron a darme espacio.
- ¡Oh! y, Devin... -Dijo Peter mientras tomaba del hombro al chico que tartamudeó cuando nos vio.
– S-si P-pan? –Dijo Devin con algo de miedo.
- ¿Cuántas veces tengo que decirte que no me llames Pan? Llámame Peter -Dijo mientras sonreía.
Devin miraba a Peter bastante confundido, como si JAMÁS se hubiese imaginado que Peter le dijera eso. Tenia el cabello café oscuro y corto, ojos azules y algunas pecas, casi imperceptibles.
- De acuerdo Peter -Dijo Devin mientras se retiraba de nuestra vista.
- Bien ________, creo que es hora de que vayas a dormir, te ves bastante cansada.- Dijo Peter mirándome a los ojos.
- ¿Que? ¡Pero sí acabo de llegar! bueno, llevo horas aquí, p-pero estaba encerrada, ¡así que no cuenta! Además... -Bostecé- Quiero conocer Neverland....
- Y lo harás, mira, hagamos un trato. Tú duermes y recuperas energías, y yo mismo te mostraré el lugar en cuánto despiertes, ¿de acuerdo?
- ¿Bromeas? ¿Quién quiere dormir cuando acaba de llegar a un nuevo mundo? ¡aún menos sí es Neverland! automáticamente se me quitó el sueño.
- Me gusta tu entusiasmo ________, pero creo que lo mejor será que aceptes mi trato por ahora...
Peter tenía razón, me sentía cansada y debía recobrar energía, solo que mi emoción por ver Neverland me hizo querer ignorar mi cansancio.
- De acuerdo -exclamé algo triste- ¿En qué tienda dormiré?
- ¿Tienda? No, de ninguna manera __________, tú eres la invitada de honor, no dormirás en una tienda -dijo Peter mientras me tomaba de la mano- Ven, sígueme...
Peter me condujo a un árbol que estaba a unos cuántos metros de distancia de el campamento, el árbol era grande y frondoso, en el tronco estaban talladas unas escaleras que conducían a una maravillosa casa del árbol, hecha de madera, bastante pintoresca.
Subimos las escaleras y, al entrar, me quedé asombrada por lo lindo que estaba decorado todo. Era una habitación sencilla que consistía en una cama matrimonial, un ropero, una mesita de noche y un tocador. La habitación estaba llena de ventanas, 3 de ellas alrededor de la cama, por las cuales se podía apreciar toda la belleza de la naturaleza, y el hermoso cielo cubierto de estrellas.
- ¿Te gusta? -Preguntó Peter, mientras me miraba contemplar toda la habitación en silencio-
- ¡Me encanta! -Respondí mientras lo volteaba a ver con una sonrisa.
- ¿De Verdad? ¡Me da mucho gusto!, lo decoré yo mismo -dijo sintiéndose orgulloso-
- Pues tienes muy buen gusto...
- Te sorprenderías... -dijo mirándome y levantando una ceja- Bueno, te dejaré descansar, dulces sueños ________, nos vemos mañana. -Dijo mientras se encaminaba hacia la puerta.
- ¡Estaré lista para la aventura! -Grité, haciendo que Peter volteará a verme una vez más.
- Esa es la actitud - Dijo mientras guiñaba un ojo, y salía por la puerta.
Apagué la vela que estaba en la mesita de noche, la cuál iluminaba toda la habitación, y me recosté en la cama, ahora estaba bajo la luz de las estrellas que se miraban por las ventanas. Me quedé algunos minutos emocionada, pensando en todas las aventuras que me esperaban, estaba muy emocionada de estar ahí, ¡y de haber conocido a Peter Pan! mi crush de la infancia...
Todo era perfecto, estaba tan feliz que hasta se me había olvidado el incidente con los niños perdidos y las horas que pase en la jaula, hasta la actitud de los chicos cuando Peter me defendió. La aventura estaba ahí afuera, esperándome. Mientras más rápido amaneciera, mas rápido podría empezar a recorrer Neverland con Peter. Cerré los ojos, y caí profundamente dormida, con la sonrisa aún en mi rostro.
