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- Señora Gibson, un gusto conocerla- dijo educadamente Tyler
- Él es Tyler, mi novio - lo presentó Megan
- Conozco a Tyler desde que era un niño - interrumpió Grace, que también están presente
- Es un gusto conocerte, y aprecio el hecho que estés aquí - respondió al fin Kate - ¿Vienes a pedir permiso para ser novios? - rió
- No mamá, Tyler y yo nos casaremos la próxima semana - escupió sin rodeos Megan
- ¡Siempre te ha gustado hacer bromas!
- No es una broma, señora Gibson, por eso estoy aquí - asumió Tyler
- Los felicito, niños, tienen mi apoyo- aprovechó de decir Grace
- ¿Estás loco? Megan tiene apenas 18 años y tú quieres casarte con ella - gritó histérica Kate
- No entiendes, mamá
- ¿No entiendo qué?
- Megan está en peligro, la única manera en que está a salvo es casándose conmigo - dijo Tyler
- Megan está mejor que nunca
- ¡Es su destino! Deja de preguntar Kate, por favor, en su momento te contarán por que el apuro de casarse- dijo harta Grace
- Destino - pensó Kate - está bien, con la condición de que me contarán que es lo que está pasando
- Se lo prometo, lo haré yo mismo - se comprometió Tyler
- ¿Cómo lo haremos con los preparativos? Tenemos sólo una semana - preguntó preocupada Kate
- Me encargaré de todo yo, no hay de que preocuparse.

Al fin y al cabo, Kate no había tomado tan mal la noticia.
Mañana por la mañana, salía su vuelo hacia Las Vegas, la acompañaría Ashley, y también llegaría Kyle.
Su papá también debía saberlo y por supuesto, estaría invitado.

El viaje había sido agotador, y habían llegado a la casa de Brad, el Papa de Megan.
Tocaron el timbre del departamento, pero nadie abría
- ¿Estás segura que aún vive aquí? - preguntó Ashley
- Por supuesto que si - tocó el timbre de nuevo - ¿Porqué demora tanto?.

La puerta se abrió de golpe, dejando ver al papá de Megan, despeinado, y con pijama
- ¿Megan? - preguntó
- Así me llamaste cuando nací.

Megan soltó su maleta, y abrazó a Brad.
Hace mucho tiempo no se veían, y en verdad que Megan lo extrañaba
- Ella es Ashley - dijo mientras se separaban
- Hola, es un gusto poder conocerlo antes que todos - sonrió Ashley.
Ambas entraron al departamento y acomodarnos sus cosas.
En la cocina las esperaba Brad con algo para comer
- ¿Cuándo le dirás? - susurró Ashley
- No lo sé, primero comamos algo y se lo lanzo más tarde.
Fueron hacia la mesa que estaba repleta de comida en la cocina.
Se sentaron junto a Brad a desayunar
- Es un milagro tenerte por aquí - dijo Brad mientras marcaba un pedazo de pan
- Si, te extrañaba mucho - mintió
- Yo también, te fuiste y ni siquiera te despediste
- Si, lo siento, no alcancé a despedirme de nadie - justificó Megan
- ¿Esta visita se debe a algo?
- No, sólo tenía ganas de verte - mintió de nuevo
- ¡YA DILE, MEGAN, BASTA DE RODEOS, LO HACES TÚ O LO HAGO YO! - dijo desesperada Ashley
- ¿De qué habla ella, Megan?
- Díselo - alentó Ashley de nuevo
- Papá, me voy a casar en seis días más, ya está decidido.
La noticia había dejado sin palabras a Brad, pero la conocía mejor que nadie, no iba a convencerla de lo contrario
- ¡Felicitaciones! - dijo - ¿conozco al afortunado? Puedo asegurar que es Kyle
- No papá, no es Kyle y tampoco lo conoces, Ashley es su hermana
- Le aseguro que mi hermano la ama y la va a cuidar como si fuera de su propiedad - dijo Ashley
- Eso espero
- Por lo menos lo tomaste mejor que mamá - rió Megan
- Tu madre es una histérica, no tienes que decírmelo, la soporté 15 años.
Todos rieron ante el comentario de Brad.
Ashley y Megan no desaprovecharon esos días, habían ido a comprar el vestido, zapatos, vestido de cambio, ropa interior, y muchas cosas más.
Sólo esperaban el día del matrimonio.

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El próximo capítulo es la despedida de solteros y la boda, espero sus comentarios e ideas para el capítulo

COMPLETAMENTE MÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora