Historias de Starbourg

Cintas: CASETTE 1 (LADO A) TRACK 4

(Reanudando grabación)

¿Sabes? Desde hace mucho tiempo pensaba en enviarte estas cintas. Tu... sabes lo que ha pasado. No estamos las dos en los mejores momentos. Me enteré que habías ido a mi cubículo hace poco por una compañera. Es mi mejor amiga, su nombre, Hy... (Silencio) Perdón, su nombre es Mónica, entró a trabajar el mismo año que yo. Como somos de la edad, congeniamos bastante. Las dos tomábamos café todos los días. Ella siempre llega temprano, mientras que yo, por lo general llegaba bastante tarde, la escuela quedaba un poco lejos del edificio.

Ella me preguntaba por el señor de la foto, osea, mi tío. Nunca le logré contar lo que hoy te cuento a ti. Aunque es mi mejor amiga, yo sabía que no entendería la situación.

Una vez, cuando era día libre, decidimos tener una pijamada en mi casa. Que ahora que lo pienso, yo nunca supe donde vivía. Talvez ella sigue o seguía viviendo en casa de sus padres. Yo tenía preparados unos bocadillos que había comprado en el supermercado y ella trajo una botella de vino. Como apenas me había mudado a ese departamento, no había desempacado los platos, todavía no compraba servilletas y como apenas tenía la edad para empezar a tomar alcohol, no tenía ni una sola copa. Así que utilizamos papel higiénico como platos y como las servilletas y vasos desechables para el vino. Mónica se las arregló de alguna manera para abrir el vino y lo sirvió. Todavía recuerdo como me dijo "Tienes un piano súper costoso pero no tienes servilletas". Las dos nos reímos, y después empezamos a comer. Yo le platiqué de como me iba en la escuela y ella me platicó sobre todo el trabajo que había hecho hacía unos días.

Aunque es cierto que apenas tenía la edad para tomar cualquier bebida alcohólica, yo tomaba bastante. No quiero sonar como alcohólica, pero me gusta el alcohol. Tampoco bebo hasta desmallarme, solamente cuando de verdad se me apetece. Ella también tomaba bastante. Y así fue esa noche. Después de una hora y media, las dos nos encontrábamos en un estado no muy favorable. También teníamos sueño. El plan era que, como todavía no tenía muebles en la habitación mas que mi cama, pondríamos un sleeping bag y allí se dormiría Mónica. Nos acostamos pasadas las doce de la madrugada. Yo en realidad no tenía muchas ganas de dormir, creo que en realidad quería un poco de paz interior, en la cama. "Oye, ¿No tienes calefacción?" Me preguntó Moni.

(Pausa)

(Continuará)