Una Fraternidad Zodiacal

20

*Multimedia de Leo*

Y la carrera empezó, ambos signos salieron disparados hacia el campo, ambos querían ganar para obtener lo que anhelaban.

Pero a mitad de la carrera Escorpi no siento sus piernas y tropezó haciendo que lanzará un grito. Mientras el carnero corría escuchó el grito y fue a ayudar a la escorpiana.

-¿Qué pasó?.- Dijo mientras la ayudaba a levantarse.

La chica recibió la mano del rubio mientras sentía que su rodilla ardía.

-Eso esta feo.- Dice Aries mientras observa la herida de la castaña.- Vamos a la fraternidad a desinfectarlo.

El chico limpio la herida con agua de la botella rosa de la chica mientras la ayudaba a llegar a la fraternidad.

-Creo que perdí.- Dice Escorpi en el camino.

El chico solo se limita a responder.

-Yo tampoco gane...¿Ahora?.- Dice el carnero.

La escorpiana lo piensa en todo el camino.

-Tú ganaste porque me caí.- Dice causando que el chico la vea.

El sonrie.

-Entonces me debes un beso.- Dice cuando llegan la puerta de la fraternidad.

Escorpi se muerde el labio y se acerca a él con los ojos cerrados mientras que el carnero imita el acto esperando el tacto suave de los labios de ella.

-¿Qué carajos?.- Dice Escorpio mientras abre la puerta.

Al escuchar la voz del rubio, ambos se sobresaltan mientras maldicen al hermano mayor de la castaña.

-Entra a la casa jovencita.- Dice mientras la mueve hacia la fraternidad.- Y tú.- Señala al carnero.- Vete a casa, no podrás verla.

Cuando las palabras terminaron, el escorpión cerró la puerta de golpe, dejando al carnero confundido.

Luego de unos minutos mientras Aries golpeaba la puerta para que pueda entrar a la fraternidad, el león abrió la puerta y vio a su rubio amigo.

-Tú, te necesito.- Dijo Leo mientras jalaba a su amigo.

--
Capri entró cansada a su habitación sin su hermano ya que el castaño prefería salir todo el día por ahí y solo ir a la habitación de noche para dormir y evitar a Libra, cosa que para ella era un acto de inmadurez.

-Capri, Escorpio dejo esto.- Dijo la chica del signo de la balanza.

Estiró el brazo para darle una caja amarilla con un moño rojo como decoración.

Quito con cuidado el moño y luego abrió la caja encontrándose con un libro negro.

-Me hizo un regalo...-Dijo mientras admiraba las estrellas estampadas en la pasta del libro.

-Es un lindo de su parte.- Dijo Libra mientras veía con curiosidad el rostro de la castaña.

Una sonrisa se formó en los labios de Capri mientras se echaba en su cama.

-Voy a leerlo.

-Te dejo entonces para que tengas privacidad.- Dijo la chica del cabello largo para salir del cuarto con dirección que aún no conocía.

--

-Es que no me habla y si lo hace es con indiferencia.- Dice Leo.

Virgo rodó los ojos, tenía que ayudar al león con su problema para que pueda avanzar su trabajo pero lo único que escuchaba era quejas.