¿Por Qué A Mi?

50.

No podía hacer algún reproche, Nathaly y Valentine son MUY amigas de Grace, y bueno... Sophie también

<<Entonces... Dime ¿Qué prefieres? ¿Beber cloro o lanzarte desde la ventana>>

Muerete Laureen

<<Si me muero te mueres conmigo>>

-May, camina- dijo Sophie sacandome de mi extraña conversación con mi conciencia

-Ah si, perdón- dije

Llegamos a la casa de Ethan... Mierda

-¿Qué hacemos aquí?- pregunté inocente

No recuerdo haberles contado que hablo con Ethan ¿o si?
Muchas veces tengo la sospecha de que tengo una especie de amnesia

Llamaron al timbre y Ethan abrió, las miró a todas y por último me miró a mi

-¿Hola?- dijo extrañado

-Hola Ethan ¿está Grace?- pregubtó Nathaly

-Amm si ¿Para qué la necesitas Nathaly?-

¿Se conocen? ¿De qué me perdí?

-Solo la necesitamos- dijo señalandonos

-¿Tú también la necesitas May?- preguntó

Mierda

-¿Ustedes se conocen?- preguntaron las tres al unísono

-Sí- respondimos en un suspiro

-Wow, eso no se veía venir- dijo Valentine

Me encogí de hombros

Antes de que pudieramos seguir esa incómoda conversación, Grace salió tomando un batido de frutas

-¡Nathy!- saludó a Nathaly

-¡Hola chula!- la saludó de vuelta Nathaly abrazandola

Luego de que saludara a Sophie y a Valentine me miró como si fuera un bicho raro

-¿Y ésta?- preguntó mirandome de arriba a abajo

-Vino a despedirse de ti- dijo Nathaly

-Me obligaron- me defendí

-Se nota- Grace rodó los ojos

-Bien, adiós. Ya me despedí ¿me puedo ir chicas?- dije de mala gana

Todas me fulminaron con la mirada

-Pero no tengo nada que hablar con ella- dije

-Pues si, quieres saber por qué te odia ¿no?- dijo Sophie

-Touché- dije mirandola mal

-Bueno, nosotras iremos con Ethan, hablen ustedes- dijo Valentine

-Te odio porque le gustabas a Thomas- dijo mirandome mal

-¿A ti también te gustaba Thomas?- dije impresionada

-Si ¿algún problema?- respondió

Bufé -Ninguno-

-Bien tu también me odias por algo ¿no?- preguntó

-Sí, eres muy presumida y te crees mucho haciendo sentir mal a las demás personas, sin contar que eres una maleducada, desalmada, mimada- dije

-Gracias- dijo -Pero tu envidia alimenta mi ego-

Rodé los ojos -Wow, otra más del montón que dice eso-

-¿Sabes? Mejor comprate una alcancía y ahorrate tus comentarios-

-Eso te digo- respondí

En un momento me arrojó su batido a la cabeza