Capitulo Uno

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16 de noviembre 2013, Panamá City.

Nervios. Eso era. Por primera vez hoy desde que me empezó a gustar Il volo, hoy sería mi primer concierto. Esta emocionada, nerviosa, no sabía que esperar. ¿Qué me pondría? No tenía idea.

Comencé a hacer rulos en mi cabello, no tan producidos, solo leves ondas. De fondo sonaba música de ellos. Los descubrí un día procrastinando en YouTube. Escuchaba Vivo per leí de Andrea Boccelli y en las sugerencias al lado salió ese maravilloso video que cambió por completo mi vida: O' sole mío. Para ese tiempo en que lo ví el video ya tenía una año. Al enterarme de que su nuevo álbum iba a salir me emocioné ya que sabía que eso significaba nueva gira. Anteriormente habían estado en Panamá pero para ese tiempo no los conocía. Asique pueden darse cuenta de cuanto ansiaba su regreso.

Mas que amor. Cada nota, cada letra hacia que me enamorara más y más. Mi yo de 18 años recién cumplidos, en ese entonces era la típica fangirl. Soñaba con el momento de conocerlos, y como todas, tenía la esperanza de que ellos fueran igual de románticos como lo eran sus canciones. Y mi más grande ilusión: que Ignazio se fijara en mí. Desde que lo vi en o sole mio, gordito y hermoso, capturo mi corazón, y cuando fui viendo sus cambios mis sentimientos de ternura fueron cambiando un poco. Estaba alto, sexy y bien trabajado. Me provocaba emociones distintas.

Al final terminé de arreglarme no sabía cómo normalmente las personas se vestían para ese tipo de eventos. Había optado por un jeans y una blusa con detalles de cuerina. -iras así vestida?- preguntó mi mamá entrando a mi habitación. - si por qué?- digo mirándome al espejo. - Bueno no sé, pero por el lugar donde va a ser el concierto siento que deberías arreglarte un poco más, por qué no usas una falda?- mi mamá tenía razón. El teatro Anayansi se utilizaba para eventos un poco más formales que los típicos conciertos de siempre. Me cambié a una falda con detalles en cuerina también y un par de tacones, no tan altos, negros.

Mis papas, ellos ya conocían mi amor por Il Volo, tanto así que ya hasta se sabían las canciones. Ellos me llevaron al concierto, en el camino iba mega emocionada pensando en que pasaría si los llegara a conocer. Me dejaron en el teatro y entré. Fue buena elección haberme cambiado de atuendo. La mayoría de las personas utilizaban trajes, se veía mucho brillante. No me sentí tan mal vestida. Formé la fila y esperé. Como a todos los conciertos que he ido, fui sola. Mis amigas no coincidían con mis gustos musicales. Por una parte amaba ir sola, me sentía más libre de cantar a todo pulmón sus canciones. Tomé mi lugar en la tercera fila, me tocó el puesto en toda la esquina.

El concierto transcurrió muy tranquilo. Para mí esto era nuevo, pensé que sería como los concierto a los que acostumbraba a ir, chicas gritando tratando de subir al escenario, pero no, todos permanecían en sus asientos. Me emocioné muchísimo, canté todas sus canciones, en fin fue una noche inolvidable. Por ser la última noche de gira les hicieron bromas en el escenario y reí hasta más no poder, viendo sus caras al subir a un travesti al escenario. Ignazio como siempre reído trató de hacernos reír bailando con ella, o él. Y yo solo podía verlo a él.

Una Bella NotteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora