Episodio 8

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Narrador: Mikaela.

Pasamos horas intentando buscar información de esos tres, y en todo momento fallamos, somos unos fracasados.
Andabamos caminando en alguna calle cerca del centro de la ciudad cuando mi bolsillo comenzó a vibrar por que mi teléfono estaba recibiendo una llamada, contesté rápidamente ignorando lo que dice Ferid (me estaba platicando de cuando se cayó de una bicicleta en sus tiempos de niñez).

- ¿Hola?.-

- ¡Mika-San! Soy Guren, te hablo para avisar que ya analizamos las placas de la motocicleta, y tenemos el nombre del dueño, ven rápido.-

- Allá voy.-

Regresé por donde veníamos y Ferid sólo me siguió casi corriendo para poder seguir mis pasos.

- ¿Alguna noticia que sea buena?.-

Me preguntó al subir al automóvil.

- Si, tenemos el nombre del propietario de la motocicleta.-

- ¡Ohh!! ¡Por fin una buena noticia!.-

***
Guren estaba en las oficinas cargando un montón de papeles en sus manos, cuando me vio llegar el se acercó a mí cordialmente.

- Mika, el propietario es un hombre que vive a las afueras de Shibuya, de hecho, vive muy cerca de aquella explosión que hubo hace algunos seis meses.-

- ¡Un hombre!..¡¿Quién es!?.-

- Buscamos sus datos como ciudadano y aquí está su foto de identificación.-

Mostró un papel que tenía los datos del hombre, mi teoría de que esos dos eran los culpables falló, éste hombre era un señor de 46 años y obviamente no es a quien busco, pero aún así iré a hablar con él.

- ¡¿El es el terrorista!?.-

- Un momento, un momento..No sabemos sí la motocicleta era realmente del culpable del estallido en la parada del bus, eso sólo fue una suposición.-

- ¿Entonces?.-

Preguntó Ferid mirando hacia Guren y hacia a mi.

- Vámonos Ferid, tenemos que dar una visita a las afueras de Shibuya.-

- Gracias Guren-Kun.-

Ferid le cerró un ojo notando la cara de disgusto de Guren, ignoré eso completamente saliendo de las instalaciones camino a Shibuya, tengo un leve presentimiento de que las cosas irán muy bien.

Casi una hora de viaje hicimos para llegar, efectivamente la casa estaba a las afueras de Shibuya, la casa parece estar abandonada, tocamos el timbre y el hombre se asomó por la ventana viéndonos algo asustado al notar que éramos agentes. Aún con esa impresión, el hombre nos abrió la puerta con amabilidad invitándonos a pasar.

- ¿Ustedes qué hacen aquí?.-

Nos preguntó mientras caminaba a su cocina para traer consigo tres tazas de té verde.

- Tenemos reporte de su motocicleta, usted tuvo un accidente fuera de la estación del bus Naka-Meguro y huyó..¿no es así?.-

Dejé los papeles que indicaban lo dicho junto a las fotos del desatarse y de la motocicleta.

- Están totalmente equivocados, yo no tuve ningún accidente en esa motocicleta, es más, ni siquiera tengo la moto, me la robaron.-

- ¿¡Qué está diciendo!? ¡¿Se la robaron!? ¡¿cuándo!?.-

- Si, cuando fue la explosión, hace seis meses, unos chicos pasaron corriendo por un lado mío y me golpearon para quitarme la moto e irse hacia la ciudad a toda velocidad.-

El sueño peligroso. (ItaSasu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora