Capítulo 2: A la realidad

17 0 0
                                    

Agarré mi chaqueta de cuero gris y me despedí de mis compañeros y caminé hacía la puerta. Las calles de Manhattan estaban cubiertas de nieve y la ciudad se veía hermosa. Pedí un taxi, pase por un mercado a comprar unas frutas y regresé despues de un largo día a casa. Mi casa era una grande casa moderna en los adentros de un pequeño bosque y para llegar a ella habían unos portones y un gran camino de piedra hasta llegar a ella.

-¡Sara llegué!- grité -Ya te puedes ir si deseas-
-Si señorita Palmer- me contestó educadamente
-Dime Sam sabes que te quiero y puedes estar en confianza conmigo, Sara- le dije cariñosamente

Sara me miró y me dio una sonrisa y se fue. Me tiré en el sofá de la sala, cerré los ojos y me quede profundamente dormida.

A la mañana siguiente me levanté encontrandome en el sofá aún y estaba llena de energía, tenía muchas ganas de salir y disfrutar mis días libres. Corri hacía mi cuarto y preparé sobre la cama un jean oscuro ajustado, un suéter blanco de cuello largo, unas botas grises de cuero y mi chaqueta de cuero gris y rápido corrí a la ducha.
Me dí un rico baño de agua caliente y luego salí y me vestí. Fui a la cocina por un jugo de naranja y me preparé unas tostadas con azúcar en polvo y las frutas que había comprado.

Agarré mi bolso y mis llaves y salí, ya mi chofér me esperaba.

-Buen día Salvador- saludé alegremente
-¿Cómo estás señorita Samantha, como está todo con sus padres?- preguntó Salvador, mi chofér.
- Estoy muy bien en el día de hoy, hasta ganas de bailar tengo- dije agarrándolo por las manos y dando una vuelta bailando y riendo -Y mis padres pues no me han llamado ni para saber como me encuentro, pero hoy es un día feliz y siento una vibra muy bonita sobre este día-

Mis padres no me llaman desde el día de mi cumpleaños en Noviembre 21, cuando cumplí mis 18 ellos decidieron que debía irme de casa asi que me compré la mía con lo que gano como actiz. Era una casa que fue parte de la familia anteriormente y mis padres no estaban muy de acuerdo con ella, pero no me molestaron mucho sobre ella.

-Salvador llévame al centro comercial de Manhattan- ordené.

Cuando llegué al centro comercial le dije a Salvador que me recogiera a las 4 de la tarde y luego se fue.
Me fui por las tiendas y compré algunos regalos de navidad que ya estaba cerca y unas piezas de ropa para mi. Me dio un super antojo de un rico café con unas galletitas de limón y a eso fui.
Aun faltaban pocos minutos para las 4 asi que salí a esperar a Salvador y me senté en una banca. A lo lejos veo una camioneta negra muy rara acercándose así que me levanté y caminé hacia otro lugar pero la camioneta me seguía y rápido que llegó a mi 5 hombres con enormes cámaras se bajaron de ella y comenzaron a tirar fotos y a preguntarme sobre el final de "Noche Negra" yo no dije ni una palabra solo trataba de alejarme pero no paraban de perseguirme. Necesito privacidad, mi vida, mis...
- Samantha dinos un poco la serie- gritó uno interrumpiendo mis pensamientos, asi que decidí contestar
-Solo les puedo decir que no se pierdan los capitulos finales que estarán llenos de acción y suspenso- y fingí una sonrisa para las cámaras.
Al fín Salvador llegó a salvarme jaja siempre lo hacía y me daba gracia la frase.
-Gracias Salva me tenían loca-
-No te procupes Sammy, siempre llego para salvarte.- contestó con una gran sonrisa de esas que yo solo tengo cuando estoy con mi mejor amiga.
-Porfavor Salvador déjame en el parque Central y lleva todas estas bolsas a la casa-
-Lo que pidas- contestó con tono gracioso.

Y por fín llegué...

Gracias por leer chicos ya esto se pondrá buenísimo, lo prometo.

Próximo Capítulo:
¿Histérica, yo?

ProhibidaWhere stories live. Discover now