Capítulo 4: ¿Cómo estás amiga?

10 0 0
                                    

-Espera, no eres tu la protagonista de esa serie que esta de moda ahora, ¿Cómo es que se llamaba... Noch...-
-Noche Negra- le completé
-Wow- dijo estupefacto mirándome

Permanecimos en silencio un rato sentados

-¿Por qué llorabas?- preguntó gentil
Así que llevaba mirándome desde hace mas de lo que me di cuenta...
-Tengo que irme ya me estan esperando- dije seca, ya era de noche y realmente el frío me tenía muy emocional.
-¡Espera!- dijo corriendo tras de mi -¿Te volveré a ver bonita?-
Preguntó con cara de niño pequeño lleno de curiosidad.
Solo lo miré, le sonreí y me fui sin contestar, pareció como si me hubiera hecho la difícil pero realmente estaba tan nerviosa que lo único que pude armar para él fue una pequeña sonrisa.

Vi a Salvador, corrí hacia el y me monte en el auto. Cuando llegue a casa fui directo a darme un baño caliente, llené la bañera le agregue unas gotitas de aceite de lavanda y espuma sin olor, encendí una velita de canela y me metí al rico baño. Lucas... Que hombre mas quita alientos. Mientras me bañaba me puse a pensar en el día que tuve y wow lo mejor fue el parque, aunque al principio fue incómodo, que hombre ese Lucas, pero y que me pasa yo no puedo andar soñando con chicos yo tengo una vida demasiado ocupada y arrastrar a uno a todo este asunto de 0 privacidad sería egoista... Pero él me hizo sentir bien, me hizo olvidar lo sola que me sentía.

Salí de mi baño y me puse mi pijama blanca y me acosté a ver la tele un rato hasta quedarme dormida.

Al siguiente día desperté con ganas de salir al parque y caminarlo hasta encontrarme con Lucas nuevamente pero eso no era muy realista estar horas a ver si el destino decide que él aparezca allí como si el no hiciera nada en su vida mas que ir al parque. Solo me limité a caminar por los alrededores de mi casa, tenía mucho terreno, tenía una picina y un lindo jardín con todas mis flores favoritas: girasoles, rosas, margaritas, violetas, jazmines. Corté unas pocas para ponerlas en mi sala de estar y que perfumaran el lugar. Justo cuando acabo de poner las flores en un jarrón suena el timbre y voy a abrir.

-Samantha, mi vida, mi amor, te amo y te extrañaba demasiado, vine a hacerte compañía y... ¡A ver los nuevos episodios de nuestra serie favorita "ChicaEscandalos"!-
Gracias a Dios que vino
-Hola Isabelle- dije riendo -yo tambien te he extrañado un montón estos días y bueno al fín tengo mi semana libre-
-¿Cómo estas amiga? Sabes que odio ver que estes mal, ¿No han llamado tus padres Sammy?-
-No Isa, nada de ellos pero yo estoy bien realmente si- dije poco convincente
-No me mientas que porque te adoro se cuando me mientes, pero estabien dime algo bueno que haya pasado en estos días-

Lo primero que me vino a la mente fue Lucas pero realmente no iba a contar sobre el por que conociendo a Isabelle era capaz de hacer una investigación por toda la internet solo para ver como era y metérmelo hasta en los sueños.
-Pues que tu estes aquí conmigo- le dije contenta y era cierto, la extrañaba mucho.
Ella me miro con ternura fingida solo para molestarme y luego me agarró por el brazo hasta el sofa para poner la serie en la tele, se conocía toda mi casa. Me obligó a quedarme sentada mientras ella preparaba algo para comer en la cocina que quedaba justo detras asi que podiamos ver la tele mientras ella cocinaba. Luego de comerme un rico pollo empanado a la milanesa con brocoli Isabelle decidió que se quedaría toda la semana conmigo.

Y toda la semana pasó con yo e Isabelle en fiestas obligada, en el centro comercial comprando lindos zapatos y caminatas por el parque Central... Pero ninguna de las veces que fui al parque vi a Lucas...

Próximo capítulo:
¡Acción!

ProhibidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora