Tipos de abrazos

Abrazo con "extra"

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Abrazo con "extra"

"Abrázalo y además acaricia su pelo, su espalda, dale un beso o susúrrale algo al oído"

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Gray gruño cuando se vio solo por fin, el día había sido un suplicio, desde primera hora de la mañana había estado inquieto pero no por un mal presentimiento o porque tuviera preocupaciones; o quizás si era preocupación pero no una cualquiera, era grave y grande que lo estaba volviendo loco.

¿Y qué era eso que lo tenía tan alterado?

Juvia, su novia. Recién llevaban unos días viviendo juntos y no podía soportar verla a todo momento y no es que le molestará su presencia, estaba feliz de que hubieran dado un paso tan importante en su relación, de verdad que lo estaba pero esa sensación se veía opacada por otra, la cual era la razón de sus problemas.

La peliazul era recatada para vestir, casi nunca llevaba nada demasiado llamativo, su look consistía casi en abrigos, blusas y faldas largas; por ello no se había imaginado que su novia tenía también ropa atrevida y sexy, sus pijamas —específicamente— eran dignas de esos calificativos. Si no conociera a su novia — y tuviera que imaginar su ropa para dormir — creería que usaría un conjunto de camisa y pantalón de algodón pero no era así, la chica usaba camisones cortos de seda o con encaje, los cuales delineaban perfectamente las curvas de su cuerpo. Al inicio había pensado que lo había usado la primera noche que durmieron juntos solo para seducirlo — lo cual había conseguido — pero luego —al buscar su ropa en la mañana — se había percatado de que no era el caso, esa era la ropa que realmente usaba para dormir.

Y lo cierto es que eso no le había molestado, es más le había gustado descubrir aquello pero sentía que de verla así terminaría por sucumbir a la lujuria que su mente ayudaba a avivar con pensamientos insanos de Juvia vestida con aquellas prendas que ya empezaba a odiar y amar —amabas cosas al mismo tiempo — cada maldita noche y bueno, tenía que dormir.

La puerta de la habitación se abrió dejando ver a la ojiazul, tenía el cabello húmedo por lo que supo que la chica se había duchado ya. Al terminar con ese pensamiento pues su vista se poso en su cuerpo, iba vestida solo con una de sus camisas, le quedaba un poco grande del torso pero —como si se tratará de una broma — apenas alcanzaba a cubrir su trasero por unos cuantos centímetros.

Maldijo mentalmente al notar que ver así a Juvia lo excitaba más que todos sus camisones, ella no pareció notarlo y paso a su lado hasta llegar al tocador, se sentó y comenzó a cepillar su cabello con calma, carraspeó un poco queriendo que ella lo notará.

— ¿Pasa algo, Gray-sama? — inquirió en una voz suave al tiempo que se giraba para quedar frente a frente.

Se quedo callado pensando que decir, su mente era un caos, no sabía si reclamarle por usar un atuendo tan inapropiado o agradecerle por mostrarle tan bella imagen. Se levanto sin decir nada y Juvia lo imito confusa, la abrazo asegurándose que sus cuerpos se pegaran lo más posible y recargo su barbilla en su hombro.

— Gray-sama... — la peliazul se sonrojo por su cercanía, lo sabía solo con oír su voz.

— No vuelvas a usar otra cosa para dormir — susurró en su oído, besó su cuello al tiempo que subía la camisa y comenzaba a acariciar su espalda — ¿entiendes?

La fémina soltó un gemido de sorpresa y se aferró a sus hombros — Juvia... lo entiende — musitó sin dejes de protesta o desacuerdo y él sonrió con suficiencia.

— Hoy tampoco vamos a dormir — declaró con voz ronca, la cargó —aun estando abrazados— y la llevo hasta la cama luego de que Juvia gritará emocionada un 'ah Gray-sama es insaciable' y sin quitar su sonrisa se dispuso a hacerle el amor.

Quién diría que Gray Fullbuster preferiría ver a su novia con una camisa vieja y fea en lugar de un bonito y sensual camisón de seda.

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Eso es todo, espero y les haya gustado.

Agradecimientos especiales a: Sheiluchi por comentar.

Gracias por leer ~