Capítulo 1

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Vladímir

Miró una vez más el plato con su desayuno, tostadas muy pero muy quemadas, el huevo tenía algunas partes crudas y no se animaba a siquiera oler el café. – La cara de asco delataba todos esos pensamientos y Su mujer no se lo dejaría pasar.

- ¿Qué pasa esposo mío? ¿no te gusta lo que preparé? -Sasha, definitivamente era de carácter fuerte como había advertido Grenyoi.

- Créeme que, si morir estuviera en mis planes matutinos, definitivamente probaría tu ¿Desayuno? - preguntó para molestarle, aunque de la misma manera aquella aberración no podría llamarse desayuno.

Ella dejó de cortar frutas para voltear con la cuchilla en mano.

- Eso ha sido feo, yo te preparo el desayuno con tanto amor y tu insinúas que es tóxico. - Dijo tratando de sonar como una niña de cinco años.

- El amor es tóxico nena. -Respondió Vladimir y ella solo rodó los ojos, pero no siguió insistiendo, levantó el plato y la taza de mala gana y los tiró a la basura.

- Amor...No te enojes, pero prefiero tapar mis arterias con el desayuno que ofrecen en McDonald's a siquiera oler el tuyo. -Dijo abrazándola por detrás.

Sasha giró rápidamente su cuerpo colocando su cuchilla debajo del mentón de Vlad y quedando de frente a él muy cerca le indicó.

- Quítame tus manos de encima o...- Presionó más fuerte dejando el resto de la amenaza en el aire.

- Pero si yo sólo venía a por mí besito de despedida. -Dijo levantando los brazos en el aire en señal de paz.

- Aleja tus labios de mi o te los arranco. -Dijo tirando un beso al aire y apartándolo de un empujón.

Tres meses de casado con esa mujer y aún seguía vivo, según Grenyoi eso era todo un logro.

Hasta habían apostado cuanto tiempo le llevaría a pedir divorcio, o si iría a llorar de rodillas por la anulación.

Lo cierto es que esa no era una opción, dentro de este matrimonio arreglado se esperaban muchas cosas y el tema del divorcio era sólo una tentadora broma.

Recordaba muy bien cuando tuvo que mudarse a la mansión del Pakhan... para su momento Victoria se había marchado, tras la muerte de Misha, su ascenso, la partida de Niko, retomar los negocios y formar nuevas relaciones de las que el anterior Pakhan no contaba, mucha gente les debía y la primera medida que tomó fue el no perdonar, la mayoría de su frustración se iba en esos momentos... pero no soportaba el volver a aquella casa y más tener a aquella persona esperando.

A veces (la mayoría de las veces) extrañaba la sencillez de su departamento y más cuando se encerraba por horas en el, las maratones de películas de terror y palomitas con Nikolái. Definitivamente extrañaba olvidarse de todo como cuando él le pedía que vieran esas horribles películas.

***

Connor

- y quiero que...

- Ya sé!! Por favor Lucy ya sé, ya entendí. - Suplicó golpeando su cabeza contra la guantera del auto. Luka por su parte reía entre dientes.

- Por favor nada. ¿Qué vas a hacer cuando llegues? -Preguntó inclinándose para poder verle por la ventanilla del copiloto.

- Llamar y avisarte que he llegado sanito y salvo. - Repitió ... nuevamente.

- Exacto. - Su padre sólo reía con todo el asunto y se mantenía detrás de Lucy

- ¡¡Adiós!!- Dijo agitando su mano despidiéndose.

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