Aunque no me vean... Fairy Tail (Jellal y tú) [CANCELADA]

1- ¿Por que Lucy? ¿Que te hice?

Asha en multimedia.

Narrador: (t/n)

Antes de todo, me gustaría presentarme. Soy (t/n) (t/a), maga de Fairy Tail. Utilizo varias magias, entre ellas magia de re-equipamiento, Ice-Make y magia celestial. ¡Oh cierto! También uso la magia de Dragon Slayer del verano pero vosotros shhhhh que nadie lo sabe. Mi historia es un tanto trágica, pero será mejor que vayamos por partes. Llevaba un año en ese ruidoso gremio de nombre Faury Tail, cuando un día estando de misión alguien se puso en mi contra. Lucy Heartifilia no era la chica con la que mejor me llevaba en el gremio, si, pero algo la hizo irse y a la vez quedarse. ¿Cómo? No tengo ni idea. La misión no era muy larga, además de que iba acompañada de Asha (mi compañera exceed) por lo que la cumplimos rápido. Decidimos quedarnos en una posada y al día siguiente volver a Magnolia. Llegamos sin percances y cuando entramos al gremio solo recibimos miradas de decepción y furia.
— Dime (t/n) ¿que te hizo Lucy para que vos y Asha la lastimaseis? -pregunto Wendy acercándose a nosotras.
— Wendy no sé a qué te refieres, no le hemos hecho nada a Lucy. -reclamo Asha.
— ¡Dejad de mentir! -exclamó Gray levantándose furioso- ¡Ella llegó ayer muy lastimada diciendo que fuisteis vosotras! ¡El encargo al que fuisteis no se tardaba más de medio día para cumplirlo y volvisteis un día después! ¡Explica eso sí puedes!
Abrí la boca buscando las palabras para explicar pero no las encontré, vi a mi alrededor buscando la mirada de Erza que es mi mejor amiga. No la encontré, se había ido a una misión de dos meses junto a Natsu.
— No importa lo que digas (t/n). ¿No es suficiente prueba con esto? -dijo Lucy bajando las escaleras con ayuda de Lissana extendiendo una pulsera, una que me había dado un viejo amigo.
— ¿Tú cómo tienes eso? -grite desesperada al verla manchada de sangre- ¡Devuélvemela! ¡Tú no sabes que tienes en las manos! ¡Es muy peligroso!
— ¡(t/n)! -la voz de Asha resonó lejos de mi lado.
Volví mi vista al lugar donde escuche su voz, ella estaba agarrado por todos los exceeds (Happy, Charle, Panterlily y Juju el exceed de Eren uno nuevo) evitando quiero se moviera.
— Vete del gremio, no queremos que alguien dañe a alguien de nuestra familia. Si te vas ahora no te lastimaremos. -dijo tranquilamente Mira-san.
Los mire a todos, hasta mi vista llegar a Lissana y Lucy.
— Sois peores que Sabertooth, veo que me equivoqué al pensar lo contrario. -bufé viéndola- Me voy de este gremio, y espero que no os volváis a cruzar en mi camino o no será lo mejor para vuestra salud.
Asha se soltó de sus amigos y voló a mi lado y nos volteamos para irnos. Wendy me detuvo agarrando mi brazo.
— Mejor llévate un recuerdo para que recuerdes siempre lo que hiciste. -me dijo enfriado el aire haciendo cortadas en mi brazo y quemándolo por el hielo que se comenzaba a formar.
Me libre de ella y seguí caminando con la cabeza en alto sin voltearme. Lissana lanzó la pulsera y Asha la agarro en el aire. Llegamos a mi hogar a las afueras de la ciudad, me senté en una banca del jardín. Asha trajo un botiquín, ella me desinfecto la herida y la vendo sacándome unas risas.
— De pequeña yo te curaba las heridas ¿recuerdas Asha? -pregunté abrazándola.
— Claro. Siempre me caía desde árboles altos cuando saltábamos junto a los chicos.
— Era divertido, después de todo Armin y Eren eran como mis hermanos. Hasta que nos separamos para seguir nuestros sueños.
— ¿Qué planeas hacer ___? ¿De verdad nos iremos? -preguntó triste.
— Sería lo mejor, pero no nos rendiremos. ¿Recuerdas lo que nos dijo el Master? Lo usaremos en nuestro beneficio. Vamos Asha, hay que planear todo. -dije entrando a la casa corriendo.
Asha me sigue contenta de no ir os del gremio. ¡Verán que no los necesitamos!

Al día siguiente nos despertamos muy temprano y fuimos a ver al Master pidiéndole un encargo. Accedió a dárnosla sin importar lo que sucedió ayer, al parecer no se había enterado. Le dije todo lo que pasó para evitarle sorpresas, seguido de mis planes. El encargo consistía en alejar un dragón que aterrorizaba a un pueblo. Tomamos el tren de los más tranquilas, charlando alegremente de postres deliciosos que vendían en ese pueblo. Gajeel y Lucy pasaron hablando dejándonos con la boca abierta viendo que ella no tenía ninguna herida.
— ¿Lucy? -pregunté.
— Hola (t/n) ¿vas a una encargo, no? -preguntó alegremente y de manera gentil.
Me quede sin palabras, no parecía que la Lucy que estaba en el gremio fuera verdadera viendo que apenas regresaba.
— Claro, espero que os haya ido en el vuestro. Además, una sorpresa os espera en el gremio. Nos vemos. -dije dándoles una sonrisa mientras ellos bajaban extrañados.

Cumplimos eficientemente y de pura suerte nos cruzamos con un mensajero del consejo, le pedimos que le dijeran al gremio que habíamos muerto (encargándole una carta que había escrito por si las moscas) cuando Erza y Natsu volvieran. Nos quedamos alojadas en una cabaña cerca del pueblo, visitándolo de vez en cuando. El dragón se llamaba Zifira, una dragona fuera de la comunidad de los dragones con poderes de creación. Era muy amable y accedió a irse de buena forma. Dos meses pasaron, estábamos aburridas así que decidimos que ese día dormiríamos afuera.

En Fairy Tail

Narrador: Makarov Dreydar

Pasaron dos meses, Erza y Natsu volvieron ese mismo día y en la tarde llegó un mensajero del consejo. Dijo que sentía ya pena tremenda al informarnos que (t/n) hacia agonizado en su encargo. Todos fingieron pena (menos Lucy, Gajeel, Natsu y Erza que si lo sentían) hasta que el mensajero se fue. Empezaron a celebrar, pana fose regaños de los cuatro que si la querían. Wendy llegó en ese mismo momento y la que había en el gremio se deshizo en espuma.
— ¡Wendy! ¿Puedes creer que ellos celebran la muerte de (t/n)? -incriminó Gajeel.
— ¿Qué? Ella era una buena amiga. -dijo ella acercándose a los cuatro chicos.
Decid que era hora de que lee tan la carta y Erza pidió leerlo. Decía así:

Querido Fairy Tail

Si están leyendo esto es que ya no estamos con ustedes. Pero no los culpo de no haber creído en mí, yo tampoco lo hubiera hecho.  Me gustaría poder despedirme de todos, pero no sé qué decirles. Espero que os vaya bien y me disculpéis.

Att. (t/n) y Asha

Cuando Erza terminó de leer, cayó de rodillas y lloró al igual que Wendy y Lucy. Las llame a las tres, a Natsu y a Gajeel.
— Mocosos, no tenéis que sufrir. Ambas siguen vivas, nada más que es solo una pequeña jugareta en venganza a lo que les hicieron. -les dije tratando de subirles el animo.
Ninguno se lo creyó y nada más me agradecieron emprendiendo el camino a su casa.