Promesas.(HunHan)

Capítulo 6: Nuestra "cita"

-¿Donde estas?.- como tenia que atender la llamada, salí a la terraza.

-Ya te dije que estoy con Lay Hyung.- repetí mi mentira. 

-Ya, pero promete que volverás cuando te de el pase de que todo aquí se ha calmado.- dijo KyungSoo Hyung. Era el único que se había preocupado en comunicarse conmigo aunque me explicó que se habían dividido en dos: Chanyeol/BaekHyun/KyungSoo/JongIn me apoyaban, sin embargo Chen, Xiumin, a pesar de que estaban con Suho, si les había molestado sus duras palabras para mi.- Recuerda que todos te queremos, solo no sabemos que nos pasa.

-Ajá, si claro.- dije sarcástico.

-¡HEY!.- gritó Hyung.- Oh Sehun, todos quieren disculparse...

-No todos.- interrumpí.

-Muchos queremos disculparnos.- se corrigió.- Solo estamos esperando el momento adecuado.

-Hyung como tu digas pero ahora tengo cosas que hacer.- dije. Luhan me miraba desde el otro lado de la puerta con el ceño fruncido. Y estaba en su derecho, ya que tuve que apartarme de sus labios para contestar a Hyung.

-¿Que cosas?.- renegó.- Oh Sehun ten cuidado, si alguien te reconoce, todo se va al vacío.

-Ya te entendí.- respondí.- Adiós Hyung, gracias por tenerme en cuenta.

-Solo cuídate mucho Sehunnie...

Termine la llamada y de inmediato me reúno con Luhan en la sala. Ni bien ve que me acerco, se levanta y camina a mi encuentro.- Lo siento, era una llamada importante.

-Descuida.- sonríe.

-¿A donde quiere ir mi hermoso chico?.- pregunto. Luhan se sonroja aunque ya no hay sonrisa en su rostro.

-¿Te das cuenta de lo que has dicho?.- asiento.- Tu también eres un chico, yo soy un chico, ambos somos hombres... No podemos, aunque queramos.

-Si queremos lo hacemos.- tomo sus manos entre las mías.- Yo quiero, y lucharé hasta que tu te decidas.

-Pero...

-¿Que?

-Necesito saber quien eres.- nos miramos directamente a los ojos.- Yo te he dicho tanto de mi y tu sólo me has dicho tu nombre.

-Vengo de una familia adinerada, tengo un hermano mayor, mis padres gozan de buena vida, tengo veinte años, el 12 de abril es mi cumpleaños...- suspire.

-¿Que haces por la vida?

-¿No fue suficiente?.- pregunto. Definitivamente no le diría a Luhan que mi vida era pública, eso seria como darle el empujón al NO QUIERO.

-Bueno...- dijo tratando de sonar indignado.

-Bien.- tomo sus hombros y lo acerco mas a mi.- Estoy estudiando... mandarín... por ti.

-Sehun...- susurró mientras se volvía a sonrojar.- ¿De verdad?

-Cuando lleguen los exámenes finales vendré aquí.- sonreí.- Tu seras mi calificador.

-Baasta.- tartamudeó.

-¿Te puedo decir lo primero que aprendí?.- él asintió.- ...Te amo.

Sus ojos se abrieron de sorpresa, sus mejillas ganaron mas color y por fin pude ver el brillo de sus ojos.- Yo...

-¡YA!.- gritó su hermano desde el umbral de la puerta principal.- Mantengan distancia.

-Sungyeol.- se quejó Luhan.

-Exacto.- intervino YiFan.- ¡Sungyeol!

-¿De que lado estas?.- le preguntó Sungyeol a YiFan.

-Del de la parejita.- sonrió.

-¡YiFan!.- se quejo Luhan.- No somos pareja...

-Pero lo serán, tarde o temprano lo serán.- nos guiñó un ojo.- Ahora me debo ir, no se maten.

YiFan se fue muy feliz mientras que los que nos quedamos sentimos una leve tensión. 

-Vete.- me señaló.

-Sungyeol, basta.- dijo Luhan poniéndose en medio de los dos.- Él es mi invitado, por lo que no se va a ir.

-¿Quieres que papá se entere de esto?.- amenazó. Luhan de inmediato se dió vuelta, cogió su chaqueta y tomó mi mano, arrastrándome hasta la puerta.- ¡LUHAN!

Su grito demandaba amenaza, sin embargo no le prestó atención y yo me deje hacer.

****

Luhan me llevó al hotel de la vez pasada y acordamos vernos en la noche para cenar.

Como no había llevado mucha ropa, salí al centro comercial, que afortunadamente estaba a unas dos cuadras del hotel.

Compré un traje y unos cuantos conjuntos informales.

Ya a las seis regrese para poder cambiarme y estar listo a tiempo.

Mi reloj marcaban las 7:30 p.m y justo el timbre sonó. Al otro lado de la puerta estaba Luhan vestido también con un traje que hacia resaltar aun mas su belleza.

Definitivamente quería a Luhan solo para mi.

-Hola.- saludó.

-Hola.- respondí.- Te ves muy hermoso.

-Graacias.- tartamudeó.- Tu igual.

-Gracias.- sonreí.- ¿A donde quieres ir?

-Eso depende de ti.- arrugue el entrecejo.- Recuerdo las veces que hemos salido y siempre estabas cubierto, como escondiendote, por eso es tu decisión. Si quedarnos aquí o salir.

Estaba sorprendido. Luhan me había descubierto y me entendía, aun sin saber la verdad del todo.

-¿Te apetece carta a la habitación?.- sonrió.- He oído que el plato central de esta noche es unas ricas costillas...

-Lo supuse.

-¿No te molesta?

-No.- respondió.- Estoy bien con eso. Pero espero que algún día me tengas la confianza que yo te tengo.

-Lu...- negó con la cabeza mientras se adentraba en la habitación. Que diga eso hace doler mi corazón.

Cenamos acompañados de una agradable conversación sobre la vida, el trabajo, el aprender ... Hasta que decidimos ver una película.

Nos sentamos juntos en el sofá frente a la gran televisión, reíamos cuando era necesario pero cuando los protagonistas se declararon amor y se besaron, sentí que Luhan se movía un poco incomodo. Para que dejara de lado tal escena, sin vacilar, tome su mano. 

Miró sorprendido nuestras manos unidas para luego mirar mi rostro. Y sin pensarlo, me acerque a por sus labios.

Nos olvidamos por completo de la película, solo éramos los dos tratando de decirnos muchas cosas a través de esos besos que conforme iba pasando el tiempo, subían de tono.

Del sofá pasamos a la cama, de estar en trajes pasamos a estar desnudos, de besos inocentes pasamos a hacer el amor.

-Tengo miedo.- susurró Luhan. Lo atraje a mi lado tampandonos con las sabanas.

-¿De que?

-De enamorarme tanto que de tal manera dependa de ti.- bese la coronilla de su cabeza.

No dije nada porque yo también tenia el mismo miedo, pero sobre todo estaba el miedo de que Luhan se enterara de que era una persona pública. Eso sólo haría que lo que estábamos viviendo se acabara.

Algo dentro de mi me decía que Luhan no lo comprendería, que me dejaría... Hací sintiéramos lo que sintiéramos.