Capítulo 69 + 69.1

Start from the beginning
                                    

-¿A qué hora quieres que te recoja hoy?

Oigo más que veo su sonrisa.

-Brad, ya tengo el carné ¿recuerdas?

-Mierda -susurro.

-Además, tengo algunas cosas que hacer y comeré fuera.

Sopeso la idea de pedirle que cancele sus planes, cualesquiera que estos sean, para quedarse conmigo y no salir de la cama en todo el día, pero descarto la idea a renglón seguido de calibrarla: aquí dentro, y no hablo de un lugar, todo es tiempo perdido.

-¿No vas a decirme su nombre?

-¿El nombre de quién?

-De quienquiera que sea la persona con la que has quedado.

Emma se acerca con una taza de café recién hecho entre las manos. Se sienta frente a mí, sobre la mesa de centro con las piernas cruzadas y una sonrisa burlona en la cara.

-¿En qué momento he insinuado yo que vaya a comer acompañada?

Me incorporo hasta quedar cara a cara con ella. La cabeza me palpita de dolor, pero intento no prestar demasiada atención a ese detalle insignificante. Busco sus ojos, intentando desentrañar los motivos por los que cree que hay cosas que debe ocultarme, pero es como si hubiera un cristal que antes no había entre los dos.

Entiendo que han pasado muchas cosas entre ambos, que lejos de haber estado a la altura de las circunstancias, sobre todo en el último mes, me he comportado como un absoluto cretino. La he cagado, estoy al tanto. Soy consciente de cada metedura de pata, pero nada justifica que me trate como si fuera estúpido.

-¿Por qué tiene que ser un secreto? -Inquiero con la voz teñida de amargura-. No estoy intentando controlarte, es que necesito saber que no tengo motivos para preocuparme.

-Y ¿qué pasa conmigo, Brad? ¿Es que yo no tengo derecho a saber por qué desapareces en mitad de la madrugada, noche tras noche? -Inquiere ella sin alterarse-. Vivimos juntos, ¿qué te hace pensar que no puedes ser honesto conmigo al respecto? Yo también necesito saber que no tengo motivos para preocuparme.

E M M A

Sus ojos se entretienen un instante en mi estómago, hasta que finalmente alza la cabeza y me mira a los ojos. El tiempo pasa y la tensión crece entre los dos. Cuando por fin se atreve a romper el silencio, cambiando radicalmente de tema, desearía que no lo hubiera hecho.

-Estás viéndote con alguien. ¿Es eso?

Su pregunta es como un latigazo. Y aunque en el fondo deseo decirle desesperadamente que no, se me disparan las pulsaciones y pierdo el control de mí misma.

-Y qué si lo hago -mi tono es hiriente-. Dime, qué pasará. -Brad levanta la vista por encima de mi cabeza y su expresión cambia. Su mirada aterrada vuelve a mis ojos rápidamente-. ¿Buscarás una nueva forma de castigarme? Ya me has herido de todas las formas habidas y por haber, conque ¿qué será lo siguiente?

No dice ni una palabra.

Continúo.

-Lo que yo haga con mi vida no es asunto tuyo. Llevas semanas descuidándome, ignorándome como si no existiera. Has sido capaz de alejarte sin el menor indicio de que nuestra separación te doliera. Y ¿de repente te crees en posición de someterme al puto tercer grado?

No Me Falles  [2]Where stories live. Discover now