cinco | f i n a l

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A Kyungsoo le hubiese gustado decir, para efectos dramáticos y algo interesantes de recordar, que su miseria y dolor duró largas semanas; que Jongin le ignoró olímpicamente como si hubiese nacido para ello, que lloró en cada rincón de su casa, de la facultad y del mercado, totalmente desolado por el rechazo de su moreno. Le hubiese encantado tener una historia más dramática que la que le tocó (claro, como si sufrir tortuosamente de una alergia al amor de su vida no fuese suficiente) pero en su lugar han pasado sólo dos horas de dolor y rotundo sufrimiento.

En la oscuridad de su habitación, tirado en su cama y llevando sólo un bóxer puesto, Kyungsoo se echa a morir por su suerte mientras las lágrimas le recorren las mejillas. La picazón en el cuerpo había parado desde hacía una hora atrás pero la piel le arde por lo fuerte que se rascó, sin embargo no le importa porque ¿de qué sirve entonces todo? De nada; sólo quiere deshacerse del dolor que siente en el pecho por la partida estrepitosa de Jongin, piensa que nunca más lo verá, que Jongin lo va a odiar por el resto de su vida por rechazarlo, y que jamás van a poder estar juntos porque su alergia no se lo va a permitir.

Kyungsoo se hace ovillo protegiendo su cuerpo con sus manos, el sueño lentamente abraza su consciente y es lo único que quiere, desea al menos por una noche olvidar lo que pasó, olvidar que echó a Jongin de su lado, que nunca más va a saborear el dulzor de sus besos, y el calor de su presencia. Lastimosamente no pudo sentir su piel de cerca, abrazarlo a plenitud, acariciar cada trozo de su cuerpo pero al menos tiene el recuerdo de sus labios, de sus palabras y el amor que alguna vez pudo tenerle.

Llora en silencio, es un llanto tenue pero doloroso igual.

Sus ojos pesarosamente se van cerrando y su respiración se hace más profunda, el rumor de la noche le envuelve casi arrastrándole con el. Apagó su teléfono unos minutos atrás porque ninguno de sus amigos dejaba de molestarle preguntándole por qué no llegaba, por qué se estaba tardando tanto, o si ya iba en camino. No quiere saber nada de nadie, así que es mejor dejarse llevar por el sueño y ya mañana decidir qué hacer con su vida.

Sin embargo un peso a su lado en la cama hace que todo el sueño que pudo haber sentido se escape en un santiamén, algo o alguien le arropa completamente con la sábana alrededor, su cuerpo queda atrapado de manera que parece tamal y su opresor sólo deja un espacio para que asome su cabeza y está muy dispuesto a gritar por ayuda, pero cuando sus ojos enfocan en la figura, y la piel de sus mejillas comienzan a escocer, Kyungsoo descubre de quien se trata, y el hecho no puede sorprenderle más.

—¿Jongin?

Jongin le hace seña para que haga silencio mientras sujeta su cuerpo envuelto en las sábanas, sólo su rostro queda expuesto lo que facilita el momento porque no están teniendo un contacto directo de pieles, Jongin está ahí y luce compungido debajo de la tenue luz de la noche.

—¿Perdóname, si? —pide en sollozos. Con decisión se cola encima de Kyungsoo y éste se sonroja porque todavía sigue desnudo llevando sólo un bóxer aunque las sábanas le estén cubriendo—. No sabía lo que te estaba pasando, no me di cuenta y te juro que pensé que sólo me estabas rechazando, pero luego Baekhyun me llamó preguntándome por ti, y enojado le dije lo que pasó pero él me insultó y luego me contó la verdad y perdón, perdón, perdón, fui un idiota por sacar conclusiones apresuradas y si no quieres perdonarme lo entiendo pero te quiero, Kyungsoo. Yo no puedo estar sin ti...

Kyungsoo procesa las palabras una a una, lo primero que descubre es que Jongin sabe que es alérgico a algo que posee él, que tiene el cuerpo sarnoso, picoso y completamente débil, pero también comprende sus palabras, el hecho es que está diciéndole que le quiere a pesar de todo y echándose la culpa cuando el único culpable ha sido él por ser un terco de primera y no hablar el tema como una persona que tiene una pareja con la cual conversar, porque de eso se trata. Jongin todavía le observa tan de cerca, algunas partes del cuerpo todavía se dejan envolver por la alergia pero debido a las sábanas se hace algo más soportable. Se puede decir que el momento más feliz de Kyungsoo fue cuando Jongin le pidió ser su novio, pero definitivamente el hecho más importante y especial de su vida será este, cuando Jongin decidió continuar a su lado a pesar de las vicisitudes; no merece tanto amor.

It's OK That's Allergy → KaiSooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora