OLVIDO♡

12.

Me encontraba manejando por la ciudad de Chicago, el aire era demasiado helado como para ser solo medio día, mis manos estaban aferradas al volante ya que en estos tiempos son cuando los autos crean el desastre.

Llegue a mi destino, un gran edificio color grisáceo con un número indefinido para mi cabeza de ventanales, me baje de mi auto y me dirigí a la puerta. Justo en la puerta se encontraba el guardia que hace una semana me había dejado entrar.

-Buenas tardes –le dije amablemente mientras él me abría la puerta de cristal.

-Señorita, pase –dijo con media sonrisa.

-gracias –le regrese el gesto y me dirigí a las oficinas del que ahora sería mi jefe.

Camine por un largo pasillo lleno de gente corriendo de un lado a otro, yo por otro lado alcance la puerta eléctrica del elevador, me adentre en él y teclee mi destino el cual era el octavo piso, una vez que el elevador abrió sus puertas , Salí a paso apresurado y quede de frente de la oficina más importante de todo el edificio. Toque la puerta suavemente y solo escuche un adelante,

-Buenas tardes señor Benson – dije con una ligera sonrisa.

-Hola Amber, ¿Cómo estás? –se levantó de su lugar para acercarse a mí, se inclinó y beso muy educadamente mi mejilla.

-Muy bien y ¿usted? – dije.

-Ya te dije que no me digas señor Amber- rio él.

-vale vale, está bien Oscar. –rei por lo bajo.

-Sé que es tu primer día de trabajo pero me encantaría que aceptaras en ir a cenar conmigo –dijo con un brillo en su mirada.

-Acepto ir a cenar contigo Oscar.

....

Justin.

Una semana después de la inesperada pregunta de mi esposa Sofía y ahora me encuentro en la sala de espera de un hospital de la ciudad con la noticia de que ella tiene una enfermedad terminal desde hace no sé cuantos meses y nunca me lo había dicho, realmente no se en que pensar y mucho menos porque sé que algún día morirá.

Mi vista estaba perdida en la nada pero entonces el doctor que la estaba atendiendo se acercó a mí con una de sus peores miradas, me levante del suelo rápidamente y lo encare.

-¿Y bien? –cuestione.

-Exactamente la enfermedad lleva 11 meses con 5 días, no hay una cura por lo avanzada que esta. –dijo mientras revisaba su tabla.

-y eso significa que...? –pregunte nervioso.

-Tiene solo un par de meses de vida –dijo con la voz firme.

Mi corazón parecía haber sido arrancado al mismo tiempo en el que las palabras salieron de la boca del doctor Stevens, ¿Cómo podría asimilarlo? ¿Cómo mierda iba a asimilar que mi esposa tiene un par de meses de vida? Mierda.

...

-Tal vez pensaras que voy muy rápido pero la verdad es que me interesas mucho Amber – dijo el mientras tomaba mi mano y la besaba.

-Eso es muy lindo de tu parte –dije.

-¿Aun quieres a Justin? –pregunto de la nada.

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Hola, perdón por no actualizar en todos estos días pero aquí estoy de nuevo.

muchas gracias por sus votos y comentarios que la verdad me alegran mucho. xx

¿Desde donde me leen? (: