Historia

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La conocí de una forma increíble, sus ojos mostraba la pasión que guardaba en su alma, sus labios el máximo auge de las llamas del infierno, su voz era un destellos de angelicales colores psicodélicos, las hebras de su cabello eran lienzos o caminos que demostraban una sola cosa...que cuando aquella joven amaba eran tan radiante y fuerte como la explosión de miles de bombas atómicas contenidas en un solo frasco.

Fue un día, del cual no me olvidaré jamás. Ella estaba sentada en un lugar un poco distanciado del resto de estudiantes que estábamos en aquella aula, un aula que tenía tono de melancolía, superación, fracasos y éxitos que solo aquellos que siguieron los caminos de la educación y formación de persona civilizada, pudieron lograr. Yo sentado con un compañero mío y que hasta ahora no es ni más ni menos que un amigo, el cual es un poco común a la mayoría que solo se inclina al capitalismo que arropa a la sociedad, matando los valores, la cortesía y el respeto.

Miré hacia donde estaba sentada aquella joven de carácter de diamante, espíritu resaltable y alma de mago y por alguna razón del universo o sentido de agrado una frase secuestro mi mente y se apoderó de ella:

"Lo interesante esta fuera, lo exótico dentro."

Paso el tiempo, yo me olvidé un poco de ella. De repente ella y yo teníamos discusiones continuas, por cualquier desacuerdo y ahí me fijé que el amor verdadero es aquel que sufre y allí pasa a ser verdadero y puro.

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