Mi Linda Esclava [Sasuke]

Tres

Mi cabeza da vueltas, mi cuerpo arde... Me cuesta respirar... No me siento bien.

Apoye mi cabeza entre mis brazos en mi asiento, realmente todo me daba vueltas... Toque mi frente, estaba muy caliente, ¿Tendré fiebre?

—Buenos días, _____-chan

—Buenas, Hina...—La salude con una sonrisa, ella fue a su lugar. Mi sonrisa se fue y volvió mi dolor, creo que no debí venir hoy...

Vi a Sasuke entrar, demonios, actúa normal.

—Buenos días, Sasuke.

—Ajá.—Me contesto, al menos.

"¡Teme!"

La clase comenzó.

"Estoy bien, estoy bien" pensé intentando no sentir ese horrible mareo.

Ay no... Ahora todo esta borroso... No... Realmente me siento mal... Me duele mucho la cabeza.

—________, ¿Esta prestando atención?

—S-Si, Lo siento... Sensei.—Respondí y él continuo, vi a Sasuke escribir algo.

"Deja de distraerte"

"Lo lamento" Escribí y mire al profesor

"Creo que me desmayaré" pensé

La campana sonó y yo suspire, vi a Sasuke acercarse a mi.

—¿Qué te pasa?

—N-... Nada, ¿Por qué... Lo preguntas?—Hable con dificultad, él fruncio el ceño y toco mi frente.

—¡Estas ardiendo en fiebre!—Me recriminó molesto.

—N-No es nada...

—Si no es nada, camina.—Ordeno.

Me levanté como pude y camine, no dí ni tres pasos cuando caí, siendo atrapada por Sasuke.

—¡Te lo dije, idiota!

—L-Lo siento...—Dije agitada, él me cargo entre sus brazos y me llevó a no se donde.

Abrí mis ojos y me vi recostada en una camilla.

—¿Donde... Estoy?—Pregunté en voz alta.

—En la enfermería.—Oí y volteé.

—Sasuke...

—Eres una idiota, casi tenías 40 de temperatura.

—Lo siento...—Me disculpe, se veía preocupado.

—Si serás... ¿Sabes que pudo ser peligroso?, Eres demasiado irresponsable.

—Es sólo que no me sentía bien en la escuela, en casa me sentía bien

—Le hubieras dicho al sensei, idiota.

—¿Por que te preocupas tanto por mi?

—No pienses mal, eres mi esclava, debo cuidarte.—Ese comentario fue gracioso, incluyendo su expresión algo avergonzada pero no para dejar de ser ese Uchiha gruñón.

—Ya veo...—Reí

—Te ves mejor, ya no estas tan caliente.—Mencionó tocando mi frente.

—

¿Tu crees...?—Toque su mano.—Tus manos están frías, Sasuke.—Murmure sonrojada por la fiebre con una leve sonrisa.

Sasuke quito su mano rápidamente y se levantó

—Ya estás bien, me iré a casa.

—¿Estuve todo el día aquí?—Cuestione al ver por la ventana el cielo anaranjado.