Mi Linda Esclava [Sasuke]

Uno

"¡Estúpido Kiba!" Maldije en mi mente, si, otra vez estaba siendo perseguida por Kiba, pero esta vez fue diferente, esta vez no estábamos en la escuela, dios, es un maldito acosador, realmente no me desagrada Kiba, sólo cuando se pone en modo acosador.

Mire a mis espaldas, no estaba Kiba, al menos no tan cerca, lo pude ver un poco más atrás.

"¿Que hago ahora?" Me lamenté, ví a una pelirosa y a una rubia entrar o salir de su casa, por lo que me acerqué a ellas.

-¡Disculpen!-Las llame, ellas me miraron.

-¿Si?-Dijeron al unísono, mire de reojo a mis espaldas, algo exaltada.

-¿Puedo esconderme en su casa unos momentos?-Apuntando el lugar, movía mis piernas trotando en mi lugar, estás me miraron con extrañeza

-... ¿Qué?

-¡Alguien me a estado siguiendo y necesito esconderme, por favor!-Implore desesperada apuntando a mis espaldas, la chica de ojos verdes tomo su mentón.

-No veo el problema...-Oí a la pelirosa.-Entra.

-¡Muchísimas Gracias!-Alavando a dios o cualquier cosa que fuera omnipotente, entre al lugar y ellas también, cerré la puerta y mire por la ventana.

-¿Tienes un acosador?-Pregunto la rubia algo curiosa, con una mueca de asco, seguramente por ese aterrador pensamiento.

-Si... No es mal chico, pero no estoy interesada.-Respondí con fastidio.

-Ya veo... ¿de casualidad eres Senju _______?

-¿Me conocen?-Alzando una ceja, las mire a ambas sorprendida, ellas no me sonaban mucho.

-Claro, eres muy popular en la escuela, además hija de la Directora.-Soltó con obviedad la rubia.

-Si...-Incómoda de mi ligera "popularidad" rasque mi nuca.

-¿Qué hace ella aquí?-Oí y me volteé.

"Ay no" Maldije para mis adentros.

-Sasuke-kun, Senju-san necesitaba ayuda.-La de corto cabello rosado hablo con aquel chico de oscuro cabello negro.

-No es como si me importe, pero es mi casa, así que...

Uchiha Sasuke, el tipo más amargado y arrogante que he conocido. Me odia por alguna razón que desconozco y yo, pues, es desagradable, pero no lo odio realmente.

-Yo ya me voy.-Dije, y abrí la puerta, pero ví a Kiba fuera de la casa, provocando que inmediatamente cerrará la puerta y le sonriera.-¿Me puedes esperar unos minutos?

-Ahora.-Dijo este, sude frío.

-Por favor, serán sólo unos minutos.-Imploré juntando mis manos.

-No me importa.

-Ah...-Demonios iba a abrir la puerta.-¡Haré cualquier cosa!

Él se detuvo y me miro a los ojos.

-¿Cualquier cosa?

-S-...Si.-Hable, él sonrió de lado.

"Estoy muerta." Pensé con aura depresiva

-Esta bien, puedes quedarte.-Soltó alejándose de la puerta, yo suspiré con alivio.-Pero no olvides tus palabras.

Lo ví irse, y aunque por fuera estaba tranquila, no evitaba preguntarme...

¡¿Por qué esto me pasa a mi?!, ¡No puedo creer lo que dije!

Me apoye en la puerta con desesperación y ganas de llorar, siento que hice un pacto con Satanás. Ambas chicas me miraron.